- La electricidad 4.0 y digitalización son claves para hacer de la minería una industria más sostenible.
La minería es uno de los pilares económicos más destacados del Perú. Así lo demuestran las cifras que precisan que el subsector minero representó el 9% del PBI y aportó más del 64.2% del valor de las exportaciones nacionales, según el Anuario Minero 2024 del Ministerio de Energía y Minas del Perú (Minem)1. Aunque el país es líder global en la producción de cobre, oro y zinc, esta fortaleza económica también implica importantes desafíos ambientales.
En respuesta, el Perú avanza hacia una minería más sostenible. Según el informe Power Generation, Transmission & Distribution 2024 – Peru, alrededor del 48 % de la generación eléctrica proviene ya de fuentes renovables, incluyendo hidroeléctrica, solar y eólica, con proyectos activos en regiones como Moquegua, Arequipa y Cajamarca 2.
Ante este panorama, la electrificación y digitalización de las operaciones mineras emergen como herramientas estratégicas. Empresas como Schneider Electric, líder mundial en automatización y gestión energética, promueven soluciones avanzadas con inteligencia artificial, monitoreo remoto y control de procesos en tiempo real. Estas tecnologías no solo incrementan la eficiencia y seguridad, sino que también permiten reducir emisiones de CO₂, uso de agua y el impacto sobre los ecosistemas.
“Nuestra propuesta de valor se basa en la electrificación y digitalización de las operaciones mineras. Con nuestro enfoque integrado de Energía y Proceso, que une gestión energética y automatización, contribuimos a hacer la minería más eficiente, segura y sostenible”, afirma Orlando Lara, Líder del segmento de Minería, Metales y Minerales en Sudamérica de Schneider Electric.
¿Qué falta para llegar a cero emisiones netas?
Tecnologías como la electricidad 4.0 y la automatización inteligente están transformando la minería. Ejemplos como los sistemas de ventilación automática, que ajustan el flujo de aire según sensores en tiempo real, o las cintas transportadoras inteligentes, optimizan recursos y reducen el consumo energético.
Además, se requiere avanzar en la electrificación de flotas, especialmente en camiones de acarreo que hoy dependen del diésel, y acelerar la adopción de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CCS) para procesos que aún no pueden electrificarse, como las fundiciones.
Las grandes compañías mineras ya se han comprometido a alcanzar emisiones netas cero para 2050, en línea con el Acuerdo de París. Aunque no será posible lograr una minería sin emisiones en esta década, el proceso de descarbonización ya está en marcha.
El camino hacia una minería verde en Perú pasa por electrificar procesos y equipos, usar energía 100 % renovable y digitalizar las operaciones para maximizar la eficiencia. Esta es no solo una necesidad ambiental, sino también una ventaja competitiva en un mercado global que exige cada vez más minería responsable.