Las grandes compañías han comenzado a comprometer a sus proveedores directamente con la compra de energías renovables
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Más de 460 compañías de todo el mundo se han comprometido con objetivos basados en datos científicos.
Bajo el contexto actual, la demanda energética tiene una tendencia a crecer más del 25% hasta 2040, según la International Energy Agency. Las organizaciones no solo son los mayores usuarios de energía, sino que también son la clave para la adopción a gran escala de soluciones renovables y limpias. Esto es especialmente relevante en el contexto de las compañías de Tecnologías de la Información pues la evolución de la red 5G y los desarrollos tecnológicos harán que haya muchos más equipos que dependan de la electricidad para su funcionamiento.
En este sentido, APC by Schneider Electric, líder en la transformación digital de la gestión de la energía y la automatización, desarrolló un documento sobre las seis tendencias de las energías renovables en el Edge Computing, una de las soluciones que están comenzando a tener más auge en organizaciones dedicadas al desarrollo tecnológico, debido a que es el procesamiento de datos a nivel local, es decir, más cerca de donde se producen los datos, y no en la nube.
- Reducción de carbono: más de 460 compañías de todo el mundo, entre ellas Schneider Electric, ya se han comprometido con los objetivos basados en datos científicos, pues la electricidad es el componente predominante en la mayoría de las huellas de las compañías. Esta situación ha concientizado a las organizaciones porque el calentamiento global y su impacto son una amenaza para la continuidad de sus operaciones. Ante este panorama, muchas empresas han optado por explorar caminos creativos como la combinación de calor y energía, biocombustibles, y otros tipos de energías renovables.
- Involucrar a la cadena de valor: las grandes compañías han comenzado a comprometer a sus proveedores directamente con la compra de energías renovables con el fin de que estas reduzcan su consumo operacional. Esto ocurre en sectores como la industria y el retail que tienen un gran impacto ecológico, con una huella de carbono de alcance 3, por procesos como el transporte, la gestión y la cadena de suministro.
- La aparición de mercados globales viables: en todo el mundo, se han empezado a desarrollar rápidamente mercados de energía limpia, lo que implica que las organizaciones con huella global puedan encontrar proveedores y desarrollar sus operaciones en geografías que apuntan por la sostenibilidad. El principal instrumento allí es el Certificado de Atributo Energético (EAC), que facilita el seguimiento y el comercio de energía renovable, aunque todavía hay desafíos para las compañías que buscan ser sostenibles como la disponibilidad, la credibilidad, la escala y la rentabilidad. Aunque Estados Unidos, Canadá y Europa seguirán siendo las regiones predominantes, se prevé que mercados en crecimiento como India, China o Australia ofrezcan cada vez más oportunidades a las organizaciones con presencia global.
- El nexo agua-energía: el agua es un elemento de riesgo para casi todas las compañías de todos los sectores industriales, porque este recurso no solo se ve amenazado por el calentamiento global, lo que puede afectar a la continuidad del negocio, sino que no es renovable. Tan solo una planta que funcione con carbón utiliza 477 galones/ 1.622 litros de agua por megavatio-hora; este panorama hace necesario el consumo de energías renovables para mitigar el riesgo.
- Los modelos de abastecimiento colaborativos: para algunas compañías el siguiente paso es abrir el mercado a otros participantes a través de modelos colaborativos que incluyen consorcios, copropiedad y contratación de revendedores, entre otros. Esto permite que tanto pequeñas como grandes compañías logren objetivos de energías renovables.
- Las nuevas tecnologías, probando los límites de la generación renovable: la primera línea para las empresas que exploran energías renovables son tecnologías limpias que van desde microrredes hasta las pilas de combustible. Estas tecnologías están evolucionando tan rápidamente que algunas, como el almacenamiento de la batería, se han vuelto cada vez más un lugar común. La activación digital, a través de nuevas tecnologías como blockchain o plataformas virtuales como NEO Network™, facilitan aún más el acceso de los compradores a ellas y permiten una reducción de sus costos.
Cada vez es más raro encontrar una organización que no esté considerando una estrategia de acción climática, descarbonización y / o energías renovables. La economía favorable de la tecnología, combinada con el imperativo moral y operativo de la mitigación del calentamiento global sigue impulsando a las empresas en su capacidad de identificar y adoptar nuevas soluciones. En este sentido, las organizaciones líderes inspiran a mirar más allá de las circunstancias actuales para preguntar continuamente “¿qué sigue?” Una pregunta que permite ampliar los límites de lo que es posible en el siglo XXI: la economía impulsada por la energía.