En agosto, Odebrecht acordó vender el proyecto hidroléctrico Chaglla -ubicado en Huánuco- a China Three Gorges Corp. No obstante, la venta que debía estar cerrada para el 23 de febrero pasado no logró concretarse.
Así, se mantiene en suspenso hasta que el Gobierno decida qué monto de lo obtenido retendrá como penalidad y cuánto irá a Odebrecht, la constructora brasileña investigada por casos de corrupción a nivel global.
Un problema clave es que la ley vigente no especifica el monto y los fiscales han propuesto imponer a Odebrecht una multa de US$ 1.000 millones en el caso de la hidroeléctrica, de acuerdo a una persona con conocimiento de la venta. Frente a ello, la constructora y Three Gorges han solicitado al Gobierno que el cargo sea reducido a un 30%.
Asimismo, según la persona mencionada, ambas empresas están negociando una extensión de 30 días para la venta de la hidroeléctrica. Three Gorges no accedió a hacer declaraciones sobre el acuerdo así como tampoco el ministerio de Economía y Finanzas y la comisión de Economía del Congreso.
Odebrecht proyecta utilizar el producto de la venta del proyecto Chaglla de 456 megavatios para saldar deudas e impuestos y pagar a los trabajadores y proveedores, además de abonar las multas al Estado.
DATO
- La constructora tiene otro acuerdo con el Perú que permanece estancado por las mismas razones: la venta del proyecto de irrigación Olmos a Brookfield Infrastructure Partners LP y Suez SA.
Fuente: El Comercio