Terminal-de-GLP-Solgas

  • La empresa apuntará a completar su portafolio de soluciones energéticas integrales, en beneficio de sus clientes industriales.
  • Solgas cerraría el 2023 con un crecimiento de un dígito en volumen de venta del GLP.

Tras un inicio de año influenciado por la situación política y social del país, así como por los fenómenos climáticos Yaku (ciclón) y el Niño Costero, la empresa Solgas proyecta una recuperación en sus volúmenes de venta de Gas Licuado de Petróleo (GLP) parar cerrar el 2023 con un crecimiento de un dígito en la comercialización de dicho combustible.

“Las señales del mercado fueron difíciles los dos primeros meses, pero a partir de marzo vemos una recuperación más sostenida de los volúmenes. Estimamos un crecimiento de un dígito en volumen. En valor, dependerá del commodity, que es un poco variable e impredecible, y que no depende de nosotros”, afirmó Mario Matuk, gerente general de Solgas.

Para lograr esa meta, además de afianzar su servicio residencial, en beneficio de los 1.2 millones de hogares que atiende mensualmente, la empresa reforzará su apuesta por la captación de clientes industriales mediante el desarrollo de soluciones energéticas integrales, que le permitan completan su actual portafolio.

“Queremos completar un portafolio de soluciones energéticas, lo que puede significar que auditemos los sistemas de energía de nuestros clientes, especialmente del sector industrial, pesquero, minero, agroindustria y los que hemos decidido como prioritarios. Así, podemos encontrar soluciones fotovoltaicas, de generación distribuida y soluciones de GLP”, refirió.

Matuk indicó que, como parte de dichas iniciativas, Solgas ya inauguró tres proyectos fotovoltaicos pequeños en distintos clientes en Arequipa y Huancayo. Adelantó que, para el cierre del 2023, la compañía estima alcanzar 20 proyectos fotovoltaicos y de baterías.

Inversión en plantas

Para este año, la empresa además contempla una inversión de aproximadamente US$ 5 millones en la ampliación de su planta de envasado de la ciudad de Trujillo y en la construcción de una nueva planta en Piura, que reemplazará a la que ya posee en dicha localidad.

Con estos dos proyectos, cuya ejecución comenzará este año y concluiría en el tercer trimestre del 2024, Solgas apunta a ofrecer a sus clientes del norte del país una mayor capacidad de almacenamiento, así como “tener productos más amplios para sus necesidades, para una demanda residencial e industrial, de la agroindustria y pesca”.

A estas inversiones, la compañía destinará entre US$ 10 millones a US$ 12 millones para el mantenimiento de su base de activos, como lo efectúa todos los años. “Además, si el mercado crece y vemos oportunidades, siempre está la intención de seguir invirtiendo”, anotó Matuk.