La Asociación Peruana de Energías Renovables (SPR) subraya que la pronta aprobación de reglamentos claros, coherentes y plenamente alineados con la Ley N° 32249 ya no es solo una expectativa del sector, sino una necesidad urgente para el país. Esta norma representa un avance decisivo para modernizar un marco regulatorio que hoy se encuentra desfasado frente a la realidad tecnológica, económica y ambiental del sistema eléctrico peruano.
El Perú se encuentra en un punto crítico. Contar con los reglamentos de licitaciones, servicios complementarios y sistemas aislados, alineados con el espíritu de la ley, es clave para destrabar el potencial del sector energético, permitir la integración efectiva de tecnologías como la solar, la eólica y el almacenamiento, y garantizar condiciones de competencia justas y eficientes. Postergar o diluir este proceso implica mantener barreras innecesarias que limitan la inversión, la innovación y la eficiencia del sistema.
Un marco regulatorio moderno y previsible no solo fortalece la confiabilidad del sistema eléctrico, sino que es determinante para activar más de US$ 20 mil millones en inversiones privadas en los próximos años. Estas inversiones son indispensables para ampliar la capacidad instalada, diversificar la matriz energética y acompañar el crecimiento de la demanda eléctrica de forma segura, sostenible y a costos competitivos.
Los beneficios de esta modernización deben llegar directamente a los ciudadanos. Más competencia y mayor eficiencia en la generación eléctrica permiten corregir distorsiones históricas en los precios, reduciendo tarifas y mejorando el acceso a energía para los hogares, las pequeñas empresas y la industria. Mantener un marco regulatorio obsoleto significa, en la práctica, trasladar ineficiencias al usuario final y perder oportunidades concretas de desarrollo.
Desde la SPR se reconoce el rol fundamental del Estado en este proceso y se valoran los esfuerzos realizados hasta ahora. Sin embargo, el país necesita definiciones claras y oportunas. Como gremio, se reitera la disposición a colaborar de manera técnica, transparente y constructiva, pero también se reafirma la importancia de que las decisiones regulatorias estén alineadas con el interés público, la sostenibilidad del sistema y la competitividad del Perú.
El Perú cuenta con recursos naturales excepcionales para convertirse en un referente regional en energías renovables, pero ese potencial requiere reglas claras, modernas y previsibles. En ese contexto, el gobierno de transición no puede postergar más la reglamentación de la Ley N° 32249, una reforma pendiente desde hace diez años que finalmente fue aprobada en 2025, pero que solo entrará en vigencia con la publicación de sus reglamentos.
Publicar la reglamentación es indispensable para que las próximas licitaciones de compra de energía eléctrica para millones de hogares se desarrollen con nuevas reglas de apertura a la competencia y de atracción de inversiones que permitan modernizar y garantizar la construcción de nuevas centrales de energía eficiente con fuentes renovables, porque solo así se lograrán mejores tarifas para millones de usuarios eléctricos.
