Para la Defensoría del Pueblo, el reclamo contra el proyecto Tía María entró a una fase de crisis

En el Perú se han registrado 8 nuevos conflictos sociales durante julio, mientras que en Arequipa el conflicto que permaneció como latente por muchos años, se activó y entró a una fase de crisis, se trata del proyecto minero Tía María.

Para la Defensoría del Pueblo, es un caso que requiere una intervención urgente, pero la situación se agrava si se observa desde una óptica macroregional, porque dos de los nuevos conflictos de minería están en el sur.

Este es el caso de Moquegua en el distrito de Torata, cuyos pobladores señalan el incumplimiento de los compromisos de la empresa Anglo American del proyecto Quellaveco en la mesa de diálogo. Tacna es otra región donde los habitantes exigen la cancelación de la licencia de uso de agua entregada a Southen para el proyecto Candarave. A eso se suma el conflicto en Cusco, en el distrito de Velille, provincia de Chumbivilcas, cuya demanda a la empresa MMG Las Bambas, es la firma de un convenio marco para cobrar una indemnizaciones y compensaciones por el uso de la carretera.

Ver también:  Quellaveco apuesta por el crecimiento de su producción hacia el 2025

AREQUIPA. Según el reporte de Conflictos Sociales de la Defensoría del Pueblo, de los 6 conflictos en Arequipa, 4 son activos y dos latentes. Además de Islay, está el reclamo de los cayllominos sobre la ejecución del proyecto Majes Siguas II, en Ayo los pobladores se oponen a la ejecución del proyecto de hidroeléctrica Laguna Azul y en La Joya exigían la construcción de la planta de tratamiento de agua potable. Esta planta ya fue inaugurada, pero en la Defensoría permanece como conflicto latente.

Conflictos. De los 123 conflictos socioambientales entre activos y latentes, 79 están relacionados a la actividad minera

Fuente: Correo