La empresa Transportadora de Gas del Perú (TGP), operadora del gasoducto de Camisea, ha presentado una propuesta ante el Ministerio de Energía y Minas (Minem) para extender la distribución de gas natural hacia el sur del país. Este proyecto, denominado TGP Extensión Sur, requerirá una inversión de aproximadamente US$ 2,000 millones y beneficiará a las regiones de Arequipa y Moquegua, impulsando su desarrollo energético e industrial.
Con este gasoducto, TGP busca reducir significativamente los costos energéticos en la región. “El gas en el sur será hasta un 40% más barato para los hogares, un 60% más económico para los vehículos y las pequeñas industrias, en comparación con los precios actuales”, destacó el ejecutivo.
Detalles del proyecto TGP Extensión Sur
El proyecto TGP Extensión Sur contempla la ampliación del ducto de distribución desde Humay (Mollendo) hasta Arequipa y Moquegua, con una extensión de 923 kilómetros. Este gasoducto tendrá una capacidad inicial de transporte de 300 MMSCFD (millones de pies cúbicos estándar por día), con posibilidad de expansión según la demanda.
Además de reducir costos, el gasoducto permitirá la operación eficiente de las centrales termoeléctricas de Mollendo e Ilo, que actualmente operan como respaldo debido a la falta de suministro de gas. “El COES ha señalado la necesidad de aumentar la generación eléctrica eficiente en el país, y con la extensión del gasoducto, estas centrales podrán operar de manera más efectiva”, comentó Delgado.
Petroquímica
Uno de los grandes beneficios de este proyecto será el impulso a la industria petroquímica en el sur del país. Regiones como Humay o Mollendo podrán desarrollar proyectos industriales que dependan de un suministro constante y accesible de gas natural, lo que potenciará la economía local y generará nuevos empleos en la región.
“La capacidad inicial de 300 MMSCFD es suficiente para abastecer las centrales eléctricas y satisfacer la demanda de gas en Arequipa y Moquegua, así como facilitar el desarrollo industrial de la región”, señaló Delgado.
Comparación con el proyecto estatal SIT-Gas
El proyecto de TGP es complementario al SIT-Gas (anteriormente Gasoducto Sur Peruano), un proyecto estatal que busca llevar gas natural al sur del país. A diferencia de la propuesta de TGP, el SIT-Gas aún no ha logrado avances concretos. El gasoducto de TGP, en cambio, está en proceso de evaluación por parte del Minem y podría empezar su construcción en los próximos años.
Financiamiento Privado
Una de las características más destacadas del proyecto es que será financiado completamente por TGP, sin necesidad de aplicar mecanismos como la Garantía de Red Principal, que en proyectos anteriores, como el Gasoducto Sur Peruano de Odebrecht, generaba un aumento en las tarifas eléctricas.
“Con este proyecto privado, los peruanos no verán reflejado ningún costo adicional en sus recibos de electricidad. TGP tiene la capacidad financiera para asumir esta inversión de US$ 2,000 millones, una de las más grandes para los próximos años en el sector energético del país”, afirmó Delgado.
Evaluación del proyecto
El proyecto TGP Extensión Sur fue presentado al Ministerio de Energía y Minas (Minem) el 10 de septiembre de 2024 y actualmente se encuentra en etapa de evaluación conjunta. Durante esta fase, organismos como el Osinergmin, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y ProInversión brindarán consultas y comentarios preliminares sobre la viabilidad del proyecto.
En una segunda fase, el Minem realizará una evaluación técnica, económica y legal de la propuesta privada, considerando las opiniones emitidas por los organismos correspondientes. Finalmente, en una tercera etapa, se emitirán informes definitivos del MEF y ProInversión, que serán determinantes para la aprobación de la concesión solicitada por TGP.
Ampliación de la concesión
La propuesta de TGP incluye una solicitud de ampliación del contrato de concesión actual, que vence en 2033, por diez años más, hasta 2043. “Para realizar esta inversión adicional, necesitamos la extensión del contrato de concesión”, explicó Delgado. TGP estima que, una vez aprobada la extensión y firmada la adenda, la construcción del gasoducto podría completarse en aproximadamente dos años.
La aprobación final del proyecto está en manos del Estado, y aunque no hay un plazo definido para la toma de decisiones, TGP confía en que el proyecto avanzará sin mayores inconvenientes.