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Como cada año los trabajadores de Compañía Minera Antapaccay entregaron regalos y compartieron momentos de alegría y compartir con los niños de Espinar en el marco de la campaña “Un juguete, una sonrisa” que forma parte del Voluntariado Manos Solidarias.
Esta campaña de solidaridad es una iniciativa de los trabajadores apoyada por la empresa. Los esfuerzos conjuntos permitieron entregar regalos a más de 2000 niños de las instituciones educativas y comunidades de Espinar.
El apoyo se hizo realidad con el aporte económico voluntario de los trabajadores de las distintas gerencias de Antapaccay, acciones que buscan llevar una sonrisa a los niños y niñas del campo. Los cánticos navideños, momentos de juego y la infaltable chocolatada anunciaban la celebración de la Navidad en cada una de las escuelas y comunidades visitadas.
“Fue indescriptible la alegría y emoción de los niños cuando se les entregó los juguetes”, precisó Agustin Castilla, trabajador de la Superintendencia de Higiene Ocupacional, quien junto al personal médico de Plan Vital realizaron esta proyección social en los colegios de Centro Huano Huano, Paccopata, Alto Huano Huano, Cala Cala y Huarca.
Los colegios beneficiados fueron: Jose Antonio Encinas Tintaya Marquiei, Mollocahua, Antacollana, Suero y Cama, Kanamarca, Mamanoca, Huisapata, Santa Rosa y Sumacta de Imata, Ocoruro, Alto Marquiri, Chaupimayo, Pumahuasi, Chaquella, entre otras. Los trabajadores de Antapaccay también llegaron a las comunidades de Alto Ayraccollana, Hanccollahua, Aucarana, San Martin y Coroccohuayco.
Tanto los docentes, como autoridades de las zonas visitadas expresaron su agradecimiento al Voluntariado Manos Solidarias. Jhony Quispe, Secretaria de la Comunidad Hanccollahua, agradeció a los trabajadores a la Gerencia de Operaciones Mina por este gesto para los niños de su comunidad.