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Los ingenieros de minas buscan retomar con fuerza su presencia ante en el Estado, a partir de este 2019, según explicó Luis Alva, flamante vicepresidente del Capítulo de Ingenieros de Minas del Colegio de Ingenieros del Perú (CIP).
“Uno de los roles que asumiremos en nuestra gestión es posicionar a la ingeniería de minas en el debate nacional sobre temas relacionados al desarrollo de la actividad minera, sus impactos y beneficios”, agregó.
Dijo que actualmente el aspecto técnico de la ingeniería de minas, está prácticamente fuera del Estado, del Ministerio de Energía y Minas y de sus organismos especializados.
“En los ministerios hay muy pocos técnicos, muchos se han ido”, subrayó, tras demandar a sus colegas a trabajar para revertir esa situación y esbozar las acciones correspondientes.
Dijo que una medida inicial a concretar, es ver la forma de que el Capítulo de Minas tenga un representante con un escaño, tanto en el legislativo (Congreso de la República) como en el ejecutivo (Ministerio de Energía y Minas), al igual que lo tiene en el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú.
“Es un reto que tenemos que asumir y para lo cual siempre vamos a necesitar la colaboración de todos nuestros ingenieros de minas asociados. Estamos estructurando una plataforma de acción que se la haremos llegar oportunamente para que la analicen y la enriquezcan con sus planteamientos”, anotó.
También aseguró que su gestión tiene como norte contribuir a elevar el nivel profesional del ingeniero de minas para que puedan aportar mayores conocimientos en aras del crecimiento minero con desarrollo sostenible.
Minería sigue siendo motor del país
El dirigente gremial afirmó que no existe duda alguna de que la actividad minera sigue siendo el principal motor de desarrollo del país.
“No niego que aún quede algo de la minería antigua, pero ya están siendo dejadas de lado totalmente por la minería moderna que realiza su actividad con gran responsabilidad en materia social y medio ambiental”, destacó.
Al respecto, acotó que la actividad minera actualmente es muy escudriñada, “tiene muchos que la miran y si cae en algún error inmediatamente todo el mundo lo sabe, por lo que tiene que ser totalmente responsable en los temas de responsabilidad social, ambiental y seguridad.
Asimismo, remarcó que actualmente en las facultades de minería de las universidades se estudian esos temas, por lo que los nuevos egresados de la especialidad salen bien formados en esas materias.
“Ha sido un reto y hoy se ve que los jóvenes salen de las universidades nutridos de los conceptos necesarios en seguridad, medio ambiente y responsabilidad social, lo cual es muy positivo”, afirmó.
Diálogo con la gente contraria a la minería
En otro momento, Alva manifestó la necesidad de tener un diálogo fluido y sereno con los grupos adversos a la minería para hacerles entender la importancia vital que tiene para el bienestar del país en general.
“Hay gente que critica a la minería y tienen sus razones, pero no nos queda otra cosa que conversar cívicamente con ellos. El colegio de ingenieros tiene que asumir ese gran reto”, agregó.