- Hasta el momento empresa desembolsó US$ 230 millones. Prevé inicio de construcción del proyecto para el 2025.
Tras la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental, Compañía Minera Zafranal tiene como prioridades el inicio de la ingeniería de detalle este año y la actualización del costo del proyecto. De esta forma, se espera sustentar la aprobación de la inversión definitiva a fines del año 2024, reveló su gerente general, Mario Baeza.
Durante su presentación en PERUMIN 36, el representante estimó que la inversión ejecutada hasta el momento para el proyecto cuprífero asciende a US$ 230 millones, recursos que generaron un impacto positivo en la región.
Según la cartera de proyectos del Ministerio de Energía y Minas (MEM), la inversión inicial asciende a US$ 1,473 millones.
Asimismo, afirmó que una vez que se apruebe la inversión final, confían en iniciar las obras de construcción del proyecto en 2025 durante un periodo de tres años y luego iniciar las operaciones en 2028.
“Esperamos procesar alrededor de 64 mil toneladas por día en la planta concentradora que vamos a construir para este efecto”, enfatizó.
Explicó que Zafranal representa una operación sustentable por su ubicación en una zona semidesértica que no está en cabecera de cuenca y sin presencia de comunidades nativas ni campesinas. Además, no existen áreas naturales protegidas y el suministro de agua tiene como origen un acuífero salobre identificado bajo la Pampa de Majes.
Detalló que el referido acuífero salobre se encuentra a 100 metros de profundidad y que contiene agua residual acumulada en los últimos 40 años de irrigación.
“Representa un acuífero de más de 1,500 millones de metros cúbicos de agua salobre que se recarga a razón de 3 mil litros por segundo. Durante la vida de Zafranal no vamos a ocupar más del 10% del acuífero, el cual sin tratamiento no es posible usar para consumo humano ni agrícola”, aseguró Baeza.
Por último, resaltó como lecciones aprendidas la elección de un diseño y configuración de menor impacto, el relacionamiento temprano con las comunidades y áreas de influencia, la comunicación con los grupos de interés y una política de inversión enfocada en el fortalecimiento de capacidades, entre otros aspectos.
“Zafranal puede ser el próximo proyecto que se construya en Perú y los accionistas queremos que sea una realidad y una oportunidad para el desarrollo de la región Arequipa”, puntualizó.
Fuente: IIMP