Antapaccay

Con el inicio de su producción de cobre en concentrado de ley comercial en noviembre del año pasado, el proyecto minero Antapaccay, ubicado en Yauri, provincia de Espinar, región Cusco, tiene como meta el procesamiento de 70.000 toneladas de mineral diaria y un promedio de 160 mil de cobre concentrado por año, además de contenidos de oro y plata como subproductos.

Antapaccay es una operación minera de Xstrata Copper, parte del Grupo Glencore Xstrata, productor y comerciante líder a nivel global integrado de commodities, incluyendo metales y minerales, energía y productos agrícolas.

Dicha operación reemplazará a la mina Tintaya, que culminó sus actividades. Con una vida útil de más de 20 años y ubicada a 4.100 metros de altura empleará la infraestructura administrativa y logística de Tintaya, así como de la experiencia de su personal.

Antapaccay es un yacimiento tipo skarn-pórfido que produce concentrados de cobre que son transportados al puerto de Matarani. Las reservas se estiman en 720 millones de toneladas de cobre con una ley de 0,56%.

Ver también:  Antapaccay: Madres artesanas de Espinar inician programa de inscripción al Registro Nacional de Artesanas

Antapaccay aumenta gradualmente su producción hasta alcanzar una capacidad de procesamiento nominal de 70.000 toneladas por día en la primera mitad de 2013. La mina producirá un promedio de 160.000 toneladas de cobre en concentrado por año, además de contenidos de oro y plata como subproductos durante los primeros años de producción.

Antapaccay y el desarrollo de Espinar

La puesta en marcha de Antapaccay permite ampliar las operaciones mineras en la zona más allá del año 2030 y asegurar la continuidad de fuentes de trabajo y el sostenimiento en el desarrollo de la comunidad lugareña y de la región en general.

“Esto nos permitirá seguir contribuyendo con el desarrollo de la infraestructura local, proyectos sociales y desarrollo de capacidades y habilidades de la población de la zona”, señala la empresa.

En noviembre de 2012, inició su producción de concentrado de cobre de ley comercial e hizo su primer despacho a través del puerto de Matarani, en Arequipa, para clientes de todo el mundo.

Ver también:  Antapaccay logra hito en parada mayor de su planta

La operación tiene una planta de óxidos que produce cátodos de cobre con una pureza de 99,999 % de cobre y una planta de sulfuros que produce concentrados de cobre a través de un proceso de flotación.

Cómo nació Antapaccay

Ubicada a 10 km. de Tintaya, requirió una inversión presupuestada de US$ 1.500 millones, montó que aprobó invertir el directorio de Xstrata Plc tras recibir las aprobaciones al Estudio de Impacto Ambiental y Social por parte de las autoridades del Perú.

En el 2006, apenas Xstrata Copper adquirió Tintaya, identificó la posibilidad de extender la vida limitada de dicha mina -cuya operación debía cerrar hacia el 2013- con lo cual podría seguir en su contribución a favor de la provincia de Espinar.

En ese sentido, realizó una gran inversión en exploración y estudios de factibilidad con el fin de buscar nuevos recursos minerales en el entorno, que permitieran prolongar el desarrollo minero junto con el desarrollo sostenible de la zona, siendo el resultado favorable. Así nació Antapaccay.

Ver también:  Antapaccay implementa perforadora autónoma para mejorar la seguridad y rendimiento de su operación

Desempeño ambiental

Xstrata siempre ha enfocado esfuerzos en establecer y consolidar espacios de diálogo y concertación para promover el desarrollo sostenible en el área de influencia de sus operaciones mineras.

Cuentan con un Sistema de Gestión Ambiental, certificado bajo la norma ISO 14001, en línea con la política de Xstrata Copper, y que tiene como fundamento principal la prevención.

En tal sentido, realizan auditorías y monitoreos continuos, que facilitan la identificación oportuna de factores de riesgo y su posible impacto en el ambiente, así como la implementación de acciones correctivas.

Xstrata obtuvo la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Antapaccay y la extensión del plan de cierre de la mina hasta el año 2045, que involucra la extensión de plazos y la incorporación de nuevas actividades a desarrollar, entre las que se encuentra la planta concentradora de residuos.

También ha diseñado el modelo de gestión ambiental para Antapaccay, alineado al desarrollado en Tintaya, y que ya entró en vigencia.