Claire White, de International Council on Mining and Metals (ICMM).

Claire White, de International Council on Mining and Metals (ICMM).

Las 22 empresas minero-metalúrgicas y las treinta asociaciones regionales y nacionales del sector- miembros de la Internacional Council on Mining and Metals (ICMM)-, tienen el propósito conjunto de mejorar las prácticas de la industria minera mundial mediante el equilibrio de las necesidades sociales, culturales, ambientales y económicas de las comunidades afectadas por la actividad minera, aseguró Claire White, representante de dicha organización.

La funcionaria explicó que en tal sentido, “el ICMM cuenta con una Guía de Buenas Prácticas, fruto del compromiso de sus miembros, orientada a asegurar la extracción y producción responsables de minerales y metales”.

Dijo que ese documento tiene como eje, la voluntad de establecer colaboraciones y relaciones positivas con los pueblos indígenas. “Nuestro objetivo es brindar información y orientación práctica al personal de las compañías mineras, a fin de guiarlos hacia una colaboración apropiada, respetuosa y eficaz con las comunidades, para beneficio mutuo”, acotó.

Puntualizó que las relaciones entre las empresas y comunidades indígenas son de vital importancia, y precisan de más atención en cuanto al trato que se dan a las poblaciones del entorno minero.

Destaca Consulta Previa en Perú

White opinó que para realizar los proyectos mineros, es necesario el consentimiento previo, libre e informado. Señaló que preguntarles a las comunidades indígenas su postura y propugnar un entendimiento sobre los beneficios y dificultades que un proyecto pueda acarrear.

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Subrayó que “el discurso internacional imperante, es que las empresas y comunidades deben consultarse mutuamente cuando hay posiciones diferentes”, acotó.

Al respecto, destacó la Ley de Consulta Previa vigente en Perú, que otorga a los pueblos indígenas el derecho a ser consultados en el desarrollo de proyectos de extracción.

Sin embargo, comentó que la aplicación de esa norma es muy compleja, dado los diferentes actores involucrados en el tema, lo cual propicia una falta de claridad en la legislación.

Buenas relaciones en beneficio mutuo

White instó a las compañías de la industria minero-metalúrgica a establecer relaciones significativas con los pueblos indígenas del entorno de sus proyectos.

“Forjar relaciones con los pueblos indígenas basadas en el respeto, es beneficioso tanto para las compañías y las poblaciones donde existen operaciones mineras”, añadió.

Sostuvo que para ello es importante que las compañías del sector dediquen mayor tiempo a conocer a las comunidades, su contexto, preocupaciones y aspiraciones particulares.

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Guía de Buenas Prácticas

White precisó los postulados principales de la Guía de Buenas Prácticas del ICMM:

Asegurar que los pueblos indígenas conozcan sus derechos, estén informados sobre toda la gama de efectos sociales y ambientales (de corto, mediano y largo plazo), positivos y negativos, que puede traer consigo la minería, y que los comprendan.

Que las compañías atiendan las preocupaciones de comunidades sobre efectos posiblemente negativos; y apliquen estrategias de mitigación que consideren la idiosincrasia tradicional con trato respetuoso para entendimientos mutuos.

Las aspiraciones indígenas deben tenerse en cuenta en la planeación del proyecto, de modo que la gente sea copropietaria de programas e iniciativas de desarrollo comunitario y participe en las decisiones pertinentes. Es decir, que los procesos de colaboración sean inclusivos.

Que las empresas, en etapas tempranas del ciclo de vida de un proyecto, sienten bases sólidas para la colaboración continua con los pueblos indígenas, para anticipar y manejar los riesgos y oportunidades que podría traer consigo el proyecto.

Uso de acuerdos negociados para definir y regular las relaciones entre las compañías mineras y las comunidades indígenas. Y descripción de aspectos sustantivos como el financiero, empleo e impacto de la gestión.

Prácticas de mitigación del impacto y de los beneficios a compartir. Indemnización para reparar las pérdidas físicas y económicas. Fortalecimiento de la base de activos de la comunidad. Preservación cultural y ambiental. Desarrollo de capital humano.

Compañías deben acordar procesos y estructuras culturalmente apropiados para responder a preocupaciones y quejas de las comunidades, y resolverlas.

ICMM y Banco Mundial

Asimismo, habló sobre la versión actualizada del CDT Community Development Toolkit, conjunto de herramientas que tienen los siguientes objetivos:

Promover las relaciones constructivas de trabajo y alianzas entre las comunidades, empresas y los gobiernos.

Fortalecer la capacidad dentro de los gobiernos, empresas y las comunidades para hacer frente a cuestiones de desarrollo sostenible en el nivel local.

Promover el potencial de valor añadido de la mina, el desarrollo y la operación en apoyo de los entes sociales y económicos y de desarrollo sostenible.

Mejorar las oportunidades para el desarrollo sostenible en el entorno de las operaciones de minería y metales, y de las regiones.

White manifestó que el ToolKit de la ICMM, realizado junto con el Banco Mundial para la industria de metales desea trabajar fuertemente en el cambio climático y el desarrollo sostenible; y puede ser una oportunidad para el progreso social y económico.