Por Patricia Cánepa
No sé si es un extra sentido, pero estoy sintiendo que mi tiempo en la empresa se acaba. Han habido algunas reuniones clave donde no me han invitado y veo que mi jefe no me está consultando como antes. ¿Mi puesto puede estar en riesgo?
Antes de un gran cambio, suele haber lo que los expertos llaman “ruido” o algunas señales no habladas, que se dan en el camino y podrían indicarte que tu tiempo en la empresa se acaba, pero no lo sabrás hasta que lo anuncien oficialmente, de ser el caso.
Las mejores empresas se reinventan continuamente para ser competitivas y ello puede, o no, implicar la salida de talento. Algunas señales: reuniones extensas a puerta cerrada, visitas más frecuentes de la matriz, procesos recientes de compra o adquisición, nuevo jefe, cambio en la gerencia general, cambio en las condiciones del mercado, caída en las ventas, falta de aumento salarial, repotenciamiento de áreas, tercerización de servicios, cambio de perfil, duplicidad de tareas, foco en innovación, contratación de nuevo personal, entre otros.
No te adelantes. Las señales en el camino no siempre indican salidas. ¿Qué puedes hacer mientras tanto?
Mantenerte tranquilo. Aunque preguntes, es probable que no te puedan adelantar nada. De tratarse de salidas, podría involucrar a un grupo grande de personas y es posible que todo no esté definido. Si tus presentimientos fueran ciertos y se tratara de un caso aislado por desempeño, te hubieran alertado y puesto a prueba– aunque no es una práctica común en el mercado, lamentablemente.
Si no es el caso, las mejores empresas suelen ofrecer paquetes que te permiten sobrevivir varios meses mientras buscas trabajo y suelen incluir programas de transición laboral (outplacement) que te dotan con herramientas de empleabilidad y ayudan a reducir los tiempos de recolocación.
Mantente en el radar, produciendo. No eres brujo y no podrás predecir lo que sucederá. Sin embargo, en momentos de incertidumbre, nada está dicho hasta que es oficial. Lo mejor que puedes hacer es mantenerte enfocado en tu trabajo para dar lo mejor de ti y dejar la mejor impresión. Detecta oportunidades donde puedas aportar y ofrécete para ayudar.
Mantén tu red de contactos activa. Muchos cometen el error de usar su red de contactos solo cuando la necesitan, en vez de revisarla y alimentarla continuamente. Aprovecha en actualizar tu lista de contactos y reactivar esta buena costumbre.
Revisa tus logros. Por más brillante que seas, nadie tiene el trabajo asegurado y puedes salir de la empresa en cualquier momento. Siempre es bueno revisar tus logros más importantes y tratar de cuantificarlos.
No descuides tu empleabilidad. Sea una alerta falsa o no, aprovecha para revisar si eres empleable con este video de Inés Temple, Presidente de LHH-DBM Perú.
Fuente: Semana Económica