ProActivo | El gobierno, en vez de establecer una cuarentena inteligente, optó por una de carácter medioeval y decidió cerrar todas las operaciones en sectores como la agroindustria, la pesca y la minería, que estaban preparados con sus protocolos de sanidad para seguir operando. Así lo manifestó el presidente de Buenaventura, Roque Benavides Ganoza, quien lamentó que esas acciones nos han llevado a “una crisis económica sin precedentes en el Perú”.
Manifestó que la fijación expeditiva de los protocolos sanitarios y su adopción inmediata por un sinnúmero de empresas que estaban listas para hacerlo, pudo evitar que la economía peruana cayera 40% en mayo último, comparado con el mismo mes del 2019.
“Fue una caída fenomenal que pudo haberse evitado con protocolos sanitarios inteligentes, que paralizaran las actividades que pudieran generar contagios, y manteniendo aquellas que estaban en capacidad de controlarlos”, argumentó.
Al respecto, precisó que los sectores como la agroindustria, la pesca y la minería, entre otras estaban preparados con sus protocolos de salubridad para seguir operando. “Pero el gobierno, en vez de establecer una cuarentena inteligente, optó por una de carácter medioeval y decidió cerrar todas las operaciones. Eso nos ha llevado a una crisis económica sin precedentes en el Perú”, indicó.
COVID-19 ha provocado una tormenta perfecta
Roque Benavides opinó que el coronavirus ha originado en el país una crisis política, una especie de tormenta perfecta que asusta a todos, y que debe llevar a la reflexión de la sociedad en su conjunto.
“Tras una crisis sanitaria han sucedido otras, económica y política. Y ante esta grave situación tenemos que ser muy responsables, pues el Perú merece un mejor futuro, y, por lo tanto, analizar objetivamente los hechos y adoptar los correctivos necesarios”, añadió.
Dijo que si bien, el Perú nunca ha tenido una crisis como la que estamos viviendo, que es como una guerra mundial, sí ha padecido graves crisis en determinadas épocas “y los peruanos siempre las hemos superado y debemos mantener el optimismo”.
Propuestas para salir de la crisis
El empresario minero señaló que es urgente poner en marcha los grandes proyectos agroindustriales y mineros que el país tiene en cartera, para poder jalar con celeridad el crecimiento económico del Perú.
“Ahora corresponde hacer un esfuerzo doble, cuádruple para reactivar la economía, y lograr ese 12% o 15% de crecimiento que vamos a tener en este 2020”, demandó al intervenir en el Foro Regional de Alta Dirección de Ica, organizado por Caene.
Chavimochic y Majes no pueden estar paralizados
Dijo que Chavimochic III sigue paralizado desde hace 4 años, cuando tiene un avance de obras del 80%. Señaló que su puesta en marcha permitiría irrigar más de 70 mil hectáreas, generando cientos de miles de puestos de trabajo, en el agro de la Libertad, Lambayeque y Cajamarca.
“Felicito al gobierno que haya retirado ese proyecto del gobierno regional de la Libertad y lo haya asignado al Ministerio de Agricultura para darle el impulso adicional que requiere”, destacó.
Sin embargo, lamentó que también este parado el proyecto Majes Siguas II, en Arequipa, por un tema legalista. Añadió que es necesario construir reservorios en el Alto Piura y las Pampas de Pisco, que necesitan agua para tierras de cultivo.
“No hay derecho de que esos proyectos no se hayan avanzado más rápido, cuando se pudo desarrollarlos con la iniciativa privada o las asociaciones público – privadas”, consideró.
Mal manejo e ideologización de la pandemia
Aseguró que las autoridades manejaron indebidamente el problema sanitario originado por el COVID 19, el cual debió haberse gestionado de una manera muy distinta y realista. “Nadie estaba preparado para hacerle frente a la pandemia, pero la ideologización que se dio al manejo de esa crisis, con gente de las canteras del radicalismo, hizo que el proceso deviniera en una dicotomía, ‘o la salud o la economía’”, señaló.
Anotó que un problema de tal magnitud, no se podía resolver confrontando la prioridad entre la salud y la economía, sino llegar a otras y a mejores soluciones, “preocupándonos primero por la salud, pero también por la cuestión económica”.
“Quienes tienen una ideología en contra de la economía de libre de mercado, decidieron que la prioridad por la salud debía de evitar que las empresas se mantuvieran operando, con la excusa de que se prevenía los contagios entre las personas”, explicó.
Criticó que los partidarios de esas ideologías “creen que se puede vivir permanentemente de los recursos del Estado, sin pensar que eso nos va a llevar al fracaso”.
La reactivación económica y los esfuerzos de Perú en 30 años
“El Perú en los últimos 30 años ha hecho un esfuerzo por mejorar sus finanzas públicas, evitar la inflación y generar actividad económica con muchísimos puestos de trabajo, camino que tenemos que retomar ahora con mayor dinamismo”, subrayó.
Afirmó que la reactivación por fases, como lo planteó el gobierno, ha sido un error, porque las actividades económicas que cumplieron con adoptar los protocolos sanitarios, debieron comenzar a operar mucho antes.
“La reactivación económica no involucra solamente a las grandes empresas, multinacionales o de capital extranjero, sino también esencialmente a la micro y pequeña empresa, de esa gente que hace un esfuerzo por sobrevivir”, trajo a colación. Apuntó que los pequeños negocios son los que más sufren en medio de una crisis económica, y por lo cual se pierden miles de puestos de trabajo.
Resulta un enfoque interesante Roque nos conocimos hace muchos años, cuando tu padre y tu hermano Raúl estaban en la oficina por San Felipe.
Recuerdo una frase de tu padre: “No confundamos el pasado con el presente y no debemos comparar el presente con el futuro, lo que se viene será radicalmente diferente a todo, y para ello debemos estar preparados”.
Lo que creo que nos está pasando que Lima, si bien es cierto es casi un 65% de la población del Perú, debimos habernos enfocado en la mayor empresa que es: Informal Lima S.A. cuyo capital humano es casi un 75% de la población de Lima y su economía se ubica en la apariencia de la SUNAT, en un NSE de “D” en términos económicos, pero en aspecto social y cultural podría ubicarse en el “F”, en consecuencia el Plan debió considerar las categorías y su posible comportamiento, es más, si hubiéramos cerrado Lima y las zonas más alejadas de la civilización y dar todo el apoyo en un 70% a ellos y el resto a las demás regiones, probablemente estaríamos mejor en la crisis de la pandemia y la economía no hubiera sufrido ni la mitad de la economía que tenemos hoy en día.
He conversado con gente minera de varias empresas de diferentes países y, la clave fue aislarse del resto y cumplir sus protocolos de sanidad aumentados a un nivel acorde con los riesgos potenciales, algo así como cuando desarrollan un Estudio de Impacto Ambiental en el a spite de Matrix de Riesgos.
En mis análisis económicos-financieros el Perú retrocedió entre 26 a 30 años y recuperarnos no será posible por el ritmo que vamos, ya que no tenemos el periodo 2000 al 2006 donde todo fue ascendente en diversos campos.
Y como digo tu padre Roque, no es posible compara el pasado con el presente, y lo más grave que se vislumbra es nuestro enfoque al futuro, si no sabemos cómo desarrollar nuestras necesidades.