Alexander Kulitz

ProActivoAlexander Kulitz del Partido Democrático Libre de Alemania señala que la intención de la ley alemana sobre cadena de suministros es buena, pero aumentará la burocracia y los costos a las pequeñas y medianas empresas.

La aprobación de la ley sobre la diligencia debida en las cadenas de suministro en Alemania ha activado las alarmas de los países proveedores de diversas actividades productivas a ese país. Si bien el objetivo de la misma es evitar violaciones a los derechos humanos y establecer un salario mínimo, entre otros beneficios, el miembro de la Bundestag (Parlamento Federal de Alemania), por el Partido Democrático Libre, Alexander Kulitz, considera que aún hay mucho por precisar, en especial con respecto a cómo se implementaría en el caso de las pymes.

“Nadie en Alemania tiene duda con respecto a los objetivos de esta ley. La pregunta es cómo deberíamos hacerlo. Basamos nuestra economía en la pequeña y mediana empresa, que están normalmente a cargo de una familia y dependen mucho del mercado internacional. Muchas empresas en Alemania dependen muchísimo de estos mercados”, afirmó Kulitz en declaraciones recogidas por ProActivo.

Kulitz observó que la normativa es muy burocrática y eso podría traer más problemas a los empresarios que no están acostumbrados a lidiar con este tipo de inconvenientes. Asimismo, señaló que la nueva ley también tendría implicancias para Perú.

Ley alemana tendrá implicancia en otros países

El político alemán cuestionó la norma por ser muy burocrática y “va a imponer una serie de medidas a las empresas y estas estarán a cargo de la trazabilidad de los productos en su cadena de suministro”.

Al respecto dijo que se espera que los empresarios asuman esta responsabilidad, aunque no son tan duchos en tratar con este tipo de burocracia. Además, “hay un gran riesgo incluyendo al Perú y otros países latinos y africanos. (Existe el riesgo) que hubiese alguna sustitución de los minerales. Hemos escuchado que hay mucho intercambio entre Perú y Alemania especialmente en materias primas como minerales”, advirtió Kulitz.

La ley sobre la diligencia debida en las cadenas de suministro en Alemania entrará en vigencia en 2023 y las pequeñas y medianas empresas serán las más perjudicadas con su aplicación, comentó Kulitz.

“Hemos dicho que quizás solo es aplicable a las empresas grandes con más de 3000 empleados y después de unos años con las que tienen poco más de 1000 empleados. Pero no es así, las pequeñas y medianas empresas, sobre todo las que son proveedoras de las empresas grandes, también van a tener que hacer el monitoreo y el análisis de riesgo y todas las medidas burocráticas que hay que tomar para cumplir con esta ley”, precisó.

Esta es una gran carga para las empresas más pequeñas, dijo, tras observar que “si no cumplen con esta trazabilidad de la cadena de suministros las agencias de control de Alemania van a ser forzadas por el código civil a obligar a las compañías a asumir estas responsabilidades”.

Alexander Kulitz declaró que, a pesar de tratarse de una ley creada en Alemania, puede traer consecuencias en otros países del mundo. Asimismo, insistió en que aún hay muchos puntos por aclarar en su implementación.

“La ley tiene mucha influencia sobre empresas extranjeras y sobre las instituciones legislativas de otros países, de tal manera que va a afectar a nuestras contrapartes en países terceros porque en realidad se contrapone a nuestro espíritu de comerciar con todo el mundo. No sabemos cómo se va a implementar esta ley, no tenemos un reglamento que nos indique y los ministerios hasta ahora no han podido darnos ningún detalle sobre cuáles son las empresas que van a tener que cumplir con esta ley”, indicó.

El político alemán reiteró que, si bien la norma tiene un buen propósito, la burocracia la limita.  Ejemplificó que la ley dice que los salarios deben ser justos entre los proveedores, sin embargo, habrá grandes discusiones con respecto a esto, porque no se sabe quién va a definir qué es un salario justo.

“¿Quién definirá qué será o no, una violación de los derechos humanos? ¿Será el empresario, el ministerio, la agencia que controla esto o el juez? La ley es muy buena, pero no se inserta dentro del marco legal actual en Alemania”, cuestionó.

Finalmente puntualizó que los efectos de esta ley van a ser transferidos a las empresas proveedoras en el resto del mundo, no sabemos si las empresas peruanas van a tener que cumplir con esta ley o se van a tener que buscar proveedores en otros países que puedan monitorear su cadena de suministro de manera más eficaz. Es un riesgo que afrontamos en varios países, por eso voté en contra de la ley. Hasta ahora no sabemos cómo nuestras pymes van a implementar esta ley teórica.