Mina Super Pit, en Australia.

Mina Super Pit, en Australia. (Foto: Bloomberg)

Rica en recursos, Australia Occidental ha sido elegida la región más atractiva para la inversión minera en 2021, sustituyendo al estado norteamericano de Nevada, que cayó al tercer puesto en la última encuesta anual de empresas mineras publicada por el think tank Fraser Institute.

La canadiense Saskatchewan sigue en el podio, subiendo de un tercer puesto global en 2020 a una segunda posición en el índice de 2021, que tiene en cuenta tanto la percepción de los minerales como de las políticas.

Nevada, que encabezó la clasificación de 2020, ocupó el tercer puesto el año pasado, seguido de Alaska, Arizona, Quebec, Idaho, Marruecos, Yukón y Australia del Sur.

Estados Unidos fue el país con más jurisdicciones consideradas entre las 10 más atractivas del mundo para los inversores mineros: Nevada, Alaska, Arizona e Idaho. Canadá le siguió de cerca con tres provincias a la cabeza del índice: Saskatchewan, Quebec y el Yukón. Australia sólo tenía dos estados entre los diez mejores destinos: Australia Occidental y Australia Meridional.

Al igual que en años anteriores, los mejores lugares para invertir en minería se encuentran en países desarrollados con un largo historial de éxitos en el sector, lo cual no es necesariamente positivo.

El principal problema es que el número de proyectos disponibles en las principales jurisdicciones es limitado, mientras que algunos de los mejores yacimientos del mundo se encuentran en lugares donde hacer negocios es, o se percibe como, arriesgado.

Zimbabue, que cuenta con abundantes recursos como oro, platino, diamantes, litio, cromo y carbón, se situó como la jurisdicción menos atractiva del mundo para la inversión, seguida de España, la República Democrática del Congo (RDC) y Malí.

También se encuentran entre los diez últimos, empezando por el peor, Nicaragua, China, Panamá, la argentina Mendoza, Venezuela y Sudáfrica.

Tiempos de permiso
La encuesta también incluye una subclasificación de las jurisdicciones de exploración, basada en la duración de su proceso de concesión de permisos.

El informe de este año no se limitó a Canadá, sino que recopiló datos de Australia, EE.UU. y Escandinavia, todas ellas regiones en las que las políticas mineras, medioambientales y de otro tipo son ampliamente comparables.

En la mayoría de las provincias y territorios canadienses, la mayoría de los encuestados afirmaron que podían obtener los permisos de exploración necesarios en un plazo de seis meses. Se observan algunas diferencias notables entre las regiones, sobre todo si se compara Manitoba, donde el 42% de los participantes dijo que tardó 24 meses o más en obtener todos los permisos necesarios, con Columbia Británica, donde la mayoría dijo que tardó entre tres y seis meses.

“En general, los altos ejecutivos del sector minero siguen citando la incertidumbre en torno a las áreas protegidas, las reclamaciones de tierras en disputa y las regulaciones medioambientales como principales áreas de preocupación para las provincias y territorios canadienses”, dijo Elmira Aliakbari, directora del Centro de Estudios de Recursos Naturales del Instituto Fraser y coautora del estudio.

“Los responsables políticos de todas las provincias y territorios deben comprender que los depósitos de minerales no bastan por sí solos para atraer inversiones”, dijo Aliakbari.

Quebec fue la que obtuvo los mejores resultados, ya que el 60% de los encuestados indicó que había recibido permisos de exploración en dos meses o menos. Si se comparan las cuatro regiones incluidas en la encuesta -Canadá, Estados Unidos, Australia y Escandinavia-, las jurisdicciones canadienses tienen, de media, un mayor porcentaje de encuestados que indican que tardaron seis meses o menos en recibir sus permisos.