Planta Camisea de Pluspetrol
En los últimos seis años, la producción de petróleo pasó de picos alcanzados en el 2012 y 2013 a sucesivas caídas hasta el 2017, cuando se produjo apenas 44 mil barriles por día. Además, se han devuelto lotes que se habían otorgado en concesión y la inversión en exploración se redujo considerablemente.
En consecuencia, las regiones que recibían los recursos petroleros, han visto afectados sus ingresos por canon. Según el viceministro de Hidrocarburos, Eduardo Guevara, en el 2012, las seis regiones petroleras recibieron en conjunto S/ 2 millones 383 mil, pero el año pasado este monto se obtuvo solo S/ 1 millón 558 mil, una reducción de más del 30%.
“Gran parte de los recursos de Loreto disminuyeron. Cuando hemos hablado con las comunidades, ellos no quieren que la actividad se vaya”, indicó.
La regiones afectadas fueron Loreto (de S/ 377 mil a S/ 66 mil), Ucayali (de S/ 144 mil a S/ 28 mil) y Cusco (de S/ 1 millón 527 mil a S/ 1 millón 36 mil). No obstante, tres elevaron ligeramente sus ingresos a pesar de los menores precios del crudo. Estas fueron Piura (de S/ 250 mil a S/ 302 mil), Tumbes (de S/ 81 mil a S/ 96 mil) y Huánuco (de S/ 1 mil a S/ 28 mil).
Tras la caída del precio del petróleo, los países tomaron medidas para paliar sus efectos, pero no el Perú. Según Germán Jiménez, country manager de Pluspetrol, se debió tomar acciones. “Perú lamentablemente no tuvo la reacción que tuvieron otros países y a consecuencia de eso solo el 1.8% del total de la inversión en hidrocarburos en Latinoamérica recae en el Perú”, comentó.
Para el ejecutivo de Pluspetrol, hay dos grandes escollos en nuestro país para el sector hidrocarburos: los abundantes trámites y los conflictos sociales. “Las propias regulaciones con las que trabaja hoy nuestro país haría que un proyecto como Camisea sea extremadamente difícil”, dijo. “ A Camisea le tomó un total de 18 meses en ser ejecutado. Hoy, con las leyes actuales, nuestro cálculo estima que demoraría 88 meses”, calculó.
Fuente: Correo