Se estima que la capacidad instalada de producción energética llegará a 14.208 MW el 2022.

El Perú mantendrá el desfase entre la energía que se produce en sus centrales eléctricas y lo que se está consumiendo de aquí para los próximos cinco años, por lo que se espera que al fin se concrete la posibilidad de exportar a Chile, estimó Anthony Laub, socio de Laub&Quijandría.

Según comentó, de acuerdo a las últimas mediciones del COES realizadas en julio, tenemos una capacidad instalada de 12.848 MW pero solo hay demanda para unos 6.670 MW, lo que evidencia que existe una sobreoferta.

Esta situación, añadió, se mantendrá a lo largo de los próximos cinco años, cuando llegaremos a tener 14.208 MW de capacidad instalada mientras que la demanda máxima será de 8.933 MW, 30% más de lo registrado en la actualidad. Eso significa que si bien la demanda crece, no llega a cubrir toda la producción y persistirán los problemas que aquejan hoy al sector, agregó.

Debido a que existe una mayor oferta de generación eléctrica de la necesaria, lo cual encarece el costo por la energía que se paga tanto a nivel residencial como industrial, Laub propone que el Estado se concentre en desarrollar la demanda a través de la promoción de nuevos proyectos de inversión y a la exportación de los excedentes a los países vecinos que la requieran.

Fuente: El Comercio