ProActivo | Manuel Ruiz, supervisor senior en Salud y Educación de la Gerencia de Desarrollo Sostenible en Antamina, habla sobre el proyecto de mejora de la calidad educativa “Efecto Áncash”.
Uno de los grandes pilares de la inversión privada es cuidar a las generaciones futuras, es decir los jóvenes de hoy. Así lo señala Manuel Ruiz, supervisor senior en Salud y Educación de la Gerencia de Desarrollo Sostenible en Antamina. En ese sentido, esta empresa minera lanzó en 2017 un proyecto de mejora de la calidad educativa denominado “Efecto Áncash”, ganador en los Premios ProActivo 2021.
“Se trata de buscar el desarrollo personal y generar ciudadanía en las nuevas generaciones que nos acompañan. Una compañía minera responsable que tiene proyección de estar en nuestro territorio por años necesita que sus comunidades se desarrollen junto con ellas. ‘Efecto Áncash’ es una coalición entre el sector público, privado y la sociedad civil con visión y acción hacia un cambio sistémico educativo sostenible en Huari, con proyección a Áncash”, afirmó Ruiz en declaraciones recogidas por ProActivo.
Los inicios del proyecto no fueron nada fáciles, sobre todo porque tenían que ganarse la confianza de los padres de familia de dicha zona. Sin embargo, los resultados comenzaron a verse en el primer año. Así, en 2018 las mismas escuelas pidieron la renovación porque los estudiantes de las aulas intervenidas aumentaron sus indicadores de aprendizajes y habilidades socioemocionales. Asimismo, hubo una implementación del programa de formación y acompañamiento docente.
“Así, las comunidades empiezan a transitar a un nuevo entendimiento de calidad educativa. Para el 2019 ya era necesario empezar a medir algunos logros y lo hicimos internamente y se pudo evidenciar que entre 2018 y 2019 se logró reducir de 80% a 22% la brecha de estudiantes que calificaron en los niveles 0 y 1. Además, crecieron las intervenciones sociales lideradas por estudiantes y las comunidades incrementaron su involucramiento en la discusión educativa y espacios multiactor”, indicó Ruiz.
También contó que en 2019 fue necesario llevar a cabo algunas evaluaciones externas, tal es así que con la Universidad del Pacífico se revisó un estudio para identificar cómo había sido el resultado del impacto del programa en estos chicos. “El impacto promedio atribuible a ‘Efecto Áncash’ es de 0.437 desviación estándar (DS). En comprensión de lectura fue de 0.478 DS y en razonamiento matemático de 0.382 DS. La literatura internacional indica que las intervenciones exitosas tienen un impacto de 0.14 y 0.74 DS”, precisó.
En 2020 el proyecto se enfrentó a una situación difícil. La pandemia hizo que los chicos retornen a sus casas y la empresa tuvo que descubrir de qué manera poder llevar a cabo el aprendizaje. “Pero todo problema se puede convertir en una oportunidad. Hubo una adaptación al contexto remoto gracias a un acercamiento estrecho a la institución pública (UGEL y DRE). Hubo un co diseño e implementación de programas de formación de especialistas con DRE y UGEL. Así, hubo una consolidación de la relación institucional”, dijo Ruiz.
Para el 2021 hubo un rediseño del sistema de formación y acompañamiento docente de la UGEL, así como también una implementación del nuevo sistema de medición regional.
Política pública
El proyecto aspira a convertirse en una propuesta de política pública y este año continuarán impulsando espacios de liderazgo en estudiantes de comunidades, y seguirán apoyando en la formación de futuros docentes. Asimismo, trabajan para escalar el programa “Crecemos con Amor”.
Manuel Ruiz manifestó que con el propósito de ampliar el modelo de intervención del ecosistema educativo “Efecto Ancash”, para este 2022 esperan llegar a nuevos territorios. “Por ejemplo, Huarmey. En Huari tuvimos un alcance de más de 4,200 estudiantes acompañados en las aulas intervenidas. 18 proyectos liderados por estudiantes, 26 competencias trabajadas, más de 420 docentes capacitados en sus especialidades junto a la UGEL y más de 30 familias acompañadas en crianza positiva. En Áncash son más de 190 especialistas acompañados en liderazgo y habilidades socioemocionales”, concluyó