Fuente: La República
. Vicepresidente regional de Cajamarca y candidato a la alcaldía provincial de Cajamarca por el Movimiento de Afirmación Social (MAS), advierte sobre polarización de candidatos.
¿La redistribución del canon minero anunciada por el gobierno pone en aprietos a Cajamarca?
No, en principio no es un tema que haya sido concertado con el gobierno regional; en la Asamblea de Presidentes Regionales hemos discutido eso, pero en ningún momento se habló de un tema vinculado a la distribución. Me sorprendió la propuesta del premier (César Villanueva). En todo caso, estamos a la espera de la propuesta para discutirla. Antes se intentó hacer lo mismo y se generaron conflictos como pretendió hacerlo Alan García entre Moquegua y Tacna, hay que tener mucho cuidado en esa materia, cuya propuesta ha sido genérica.
En esa redistribución hay dos posiciones: si compartes el canon, eres solidario; y si es lo contrario, mezquino, ¿en cuál de ellas está la Región Cajamarca?
No, en ninguna, porque en realidad los recursos de una región, sobre todo aquellos que vienen como el canon con el carácter de compensación por los problemas que trae la explotación de los recursos naturales -pese a que han sido importantes-, todavía son insuficientes para cerrar las brechas en esos lugares. No hay que olvidar que es una paradoja que los lugares donde se genera el canon siguen siendo los últimos en pobreza en el Perú, y eso no solo es en Cajamarca sino en el país.
El ministro de Energía y Minas, Jorge Merino, da por hecho que el terreno está abonado para Conga.
De ninguna manera concuerdo con eso, el ministro ha demostrado en varias oportunidades que en realidad está buscando trabajo en Yanacocha, el gobierno sabe que el tema es difícil y él está actuando provocativamente, el conflicto social no se ha terminado.
¿Pero se ha debilitado?
La respuesta es no. En el mismo momento que esto empiece a intentar desarrollarse, en las fases más controvertidas de este proyecto como el desagüe de las lagunas, tengo la convicción que el conflicto se va a reanudar de manera inmediata y violenta, y esto porque hay un gran sector del campesinado, a diferencia de las 32 comunidades que apoyan el proyecto; a esa gente nunca se les ha hecho caso, nunca se les ha prestado audiencia y ni los han llevado a Lima para reunirse con el presidente y eso ha generado un clima de violencia que está presente, y Merino hace mal en atizarlo permanentemente con esa actitud que no corresponde a un ministro de Estado.
¿Asegura que la construcción del reservorio El Perol será el detonante para el avivamiento de este clima social en Cajamarca?
De lo que evalúo y trato de ser objetivo en esa materia, me parece que sí.
¿Y el combustible extra serán las elecciones del próximo año?
La polarización sobre Conga es tan fuerte que no se descarta la posibilidad que en ese año, que normalmente no hay conflictos, sí tengamos uno de una manera muy dramática.
¿La reelección de Gregorio Santos aseguraría que Conga no se ejecute?
No, es un error también de quienes han considerado que en las elecciones se va a definir que Conga va o no va, porque no es tema que estemos en el gobierno o no, el tema no es Gregorio Santos, sino la posición que han tomado las comunidades cercanas al proyecto.
¿La precandidatura de Marco Arana a la presidencia de la República cierra alguna alianza con el MAS?
Estamos a bastante tiempo de las elecciones nacionales y el proceso de construcción de la unidad de izquierda es complejo. No creo que estén cerradas esas posibilidades, han tomado algunos acuerdos entre ellos que no son los mejores según nuestro punto de vista, pero habrá que mirar qué pasa, seguimos apostando por la unidad desde abajo hacia arriba.
¿A través del Frente Amplio?
A través de él o de los espacios que pudiera hacer el MAS, que es un intento más pequeño de construir una unidad de fuerzas progresistas de izquierda.
¿Ahí no tienen cabida los extremistas?
Nunca tendrán cabida, acabamos de recordar el otro día el cumpleaños de Alfonso Barrantes, su ejemplar trayectoria pública y su manera de entender la política, ella tiene sus límites, no es el ejercicio maquiavélico del pragmatismo, hay valores, hay principios y también correlaciones que hay que construir, pero sin llegar a hacer de ella un ejercicio malsano para favorecer intereses subalternos.
¿Cuánto tiempo pasará para que surja una figura como Barrantes?
Barrantes es irrepetible, tuvo condiciones personales, el rol que jugó en la izquierda peruana, esa capacidad de unir a perro, pericote y gato, esas cualidades, son difíciles de repetir. Tenía una claridad ideológica muy fuerte, no utilizaba esa categoría que a veces en la izquierda nos ha dividido. Decía, soy mariateguista, suficiente. La izquierda peruana más ha tenido líderes de plazuela, Alfonso Barrantes Lingán no lo era, sin embargo ocupó una posición singular, esa personalidad se formó en 20 años después de una derrota muy fuerte, habrá que esperar que alguien surja, que se aproxime a esa personalidad, que es irrepetible y se extraña.