energías renovablesAfirmaciones como:las energías renovables son muy costosas”, “la producción de las energías renovables consume más energía de la que genera”, “las fuentes de energías renovables no son fiables”; considerados como los principales mitos sobre las energías renovables (ER) fueron tratados hoy por la organización WWF en el evento de presentación de su  libro: “Mythbusters: Acabando con los mitos sobre las energías renovables”. Esta publicación internacional busca aclarar los mitos más populares sobre las energías renovables en cuanto su viabilidad económica, sostenibilidad y fiabilidad tecnológica.

Actualmente, nuestro sistema de energía, basado intensivamente en el uso de carbón, gas y petróleo, es el principal contribuyente al cambio climático y la contaminación ambiental. Frente a este panorama, las ER se presentan como la opción que considera lo social y ambiental, a través de una energía asequible, confiable y limpia para todos.

 Así, los costos de producción de la tecnología solar y eólica han caído en los últimos cinco años en un 80% y 60%, respectivamente y una veintena de países de América Latina cuentan con marcos normativos favorables para el fomento de estas energías (solares, eólica, hidráulica, geotérmica, marina y bioenergía). Asimismo, en el año 2013, casi 16 mil millones de dólares fueron invertidos en el sector, excluyendo grandes hidroeléctricas.

“El aclarar los mitos más populares sobre las energías renovables es un paso muy importante para WWF en su contribución a la lucha contra el cambio climático y satisfacer la demanda energética actual y futura”, declaró Tabaré Arroyo Currás, miembro de la Iniciativa Global de Clima y Energía de WWF. El experto en economía y energías renovables destacó que la publicación también busca ser una herramienta para conseguir mayor apoyo de la sociedad en el impulso de las energías limpias y renovables, condición primordial para limitar el calentamiento global a menos de 2°C.

Según WWF, uno de los mitos más populares sobre el tema es que las ER son muy caras. Si bien, algunas tienen costos iniciales de inversión más altos que las tecnologías convencionales, en su mayoría es competitivo dependiendo de la disponibilidad de recursos y la voluntad política. Algunas de las ER son ya la opción de menor costo en distintos países de América Latina.

La publicación brinda información detallada sobre algunos de los mitos y resalta que las salvedades y dificultades no son excusa para detener la capacidad del mundo de construir un futuro limpio, energéticamente seguro.