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Por Mónica Belling

Epiroc, es la nueva compañía resultado de la visión disruptiva e innovadora del grupo sueco Atlas Copco, que este año cumple 145 años y que se divide formalmente en Atlas Copco, que seguirá con sus clientes industriales; y Epiroc, cuyo significado es sobre la roca, la cual está enfocada para sus clientes en minería, ingeniera civil y recursos naturales. La decisión del gigante proveedor minero no sorprende, tras la información del presidente de Epiroc Perú, José Manuel Sánchez, de que al 2016 el grupo sueco facturó 12 mil millones de dólares, de los cuales la cuarta parte correspondió al área minera.

El objetivo apunta a que Atlas Copco y Epiroc tengan las mejores oportunidades de crecimiento dentro de sus respectivos segmentos de mercado, así como la capacidad de poder atender con mayor rapidez y eficiencia a sus demandas. La nueva empresa promete mayor innovación en equipos, al igual que en servicios, que van desde la comprensión de las finanzas globales, hasta la proyección de tecnologías inimaginables y por descubrir.

“Soplan vientos de cambio… Hemos vivido la debacle financiera de finales del 2008, el súper ciclo de precio de los metales que terminó abruptamente a finales del 2012. El menor crecimiento de China, el menor consumo de los metales básicos y también los metales preciosos. En general, la crisis financiera que afectó la viabilidad de las empresas mineras y la mayoría de sus proyectos”, refirió José Manuel Sánchez, quien también es presidente de la División Drilling Solutions de Epiroc, en ceremonia desarrollada en Lima, en el local que por 67 años llevó la marca Atlas Copco y hoy es Epiroc.

El alto ejecutivo manifestó que ese panorama obligó a muchas empresas a plantear sus estrategias, “es hora de realizar cambios radicales en el modus operandi de la industria  minera, hay que romper el status quo y salir fortalecidos de este periodo de recesión de los últimos cinco años; y también de las circunstancias actuales, cambios impredecibles y cambios que no están al alcance de nuestra mano”, sostuvo.

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Epiroc surge así como una empresa enfocada en la industria minera, en un contexto de mercados financieros muy sensibles, con amenazas de cambio de las reglas de comercio; y las presiones sociales y políticas que hoy existen en muchos países.

“El trabajo ‘top’ en una década, aún no ha sido inventado”

Frente a esas circunstancias, dijo Sánchez, “están las nuevas tecnologías, toda esa parte de conectividad y digitalización, estamos viviendo una época en que hace 10 años, más del 25% de los trabajos de hoy día no existían y nadie pensaba en ellos. Pero lo más curioso es que si ponemos solamente una década más, a partir de ahora, los estudiantes de hoy en día no saben que el trabajo que será ‘top’ en una década, aún no ha sido inventado”.

Al respecto, Helena Hedblom, presidenta del área de Negocios, en su mensaje precisó  “Como socios construiremos juntos las industrias de minería e infraestructura del futuro, de una manera sostenible, eficiente y segura. Esto es lo que llamamos en Epiroc, United in performance. Inspired by innovation’ (Unidos en el desempeño. Inspirados por la innovación).

Cambios en el KPI: ser más eficiente y hacer más con menos recursos

Sánchez observó que aquel dogmático KPI (key performance indicator), o índice de productividad del pasado, en el que se medía la productividad por empleado, “cambió radicalmente al buscar la rentabilidad por empleado” y que en la actualidad la demanda es  “ser más eficiente y hacer más con menos recursos”.

Agregó que no solo se trata de cambiar el costo directo relacionado con el personal, sino que tiene que analizarse el costo indirecto que pocos KPI reflejan, el cual está relacionado con los gastos de la logística del personal, así como de la infraestructura social de las minas.

“Aquí es donde nuestra empresa se puede convertir en un socio importante para nuestros clientes. La tecnología y la seguridad, son el presente y el  futuro de una minería rentable. Automatizar los equipos y los procesos es la clave”, aseguró.

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“Han pasado casi dos décadas desde que lanzamos nuestro Rig Control System (RCS), que nos permite incrementar las funciones automáticas del equipo a lo largo de toda su vida útil; mejorar la productividad y el control de gastos; así como tener datos operacionales y de mantenimiento en tiempo real para la toma de decisiones rápida y bien fundamentada”, añadió tras precisar que dicha plataforma está disponible en productos para la minería subterránea y de cielo abierto; así como para la infraestructura, y la exploración.

El gran paso: las minas autónomas

Al referirse específicamente a los productos para las minas a tajo abierto (open pit), anotó que la división que dirige, con base en Dallas, Texas (EE.UU.) ha dado un paso que ha sido otra revolución en la minería: la automatización. “Pasamos de una operación manual, con funciones automáticas, a una operación completamente autónoma, donde la operación está comandada a control remoto”, subrayó.

Detalló que desde hace dos años dicha división cuenta con flotas de equipos de perforación completamente autónomas, que permiten que la zona de operación se traslade de la mina a una oficina a muchos kilómetros de distancia, y donde “el operador se ha movido para ser supervisor de la operación, de una forma cómoda, segura y eficiente”.

Suecia, primer lugar en innovación

Por su parte, la embajadora de Suecia en Perú, Anna Ferry destacó el rol que cumple Epiroc en la minería global y en su país, que produce el 90% de hierro que abastece a la Unión Europea.

“Suecia ocupa hoy el primer lugar en innovación, según el Foro Económico Mundial, dándole así bienestar a nuestra población”, refirió y destacó que de las 300 firmas suecas en el mundo de la minería, “Epiroc es una de las más fuertes y tiene una gran parte del mercado global”.

Epiroc Perú, una historia que comienza

El gerente general de Epiroc Perú y la Región Andina, Ángel Tobar destacó el momento histórico del inicio y al mismo tiempo los 67 años en Perú, con un marcado protagonismo en el desarrollo minero nacional. “Es un honor para mí ser parte de un proceso tan apasionante como es la creación  de la nueva compañía Epiroc, que lleva con orgullo los más de 140 años de historia del grupo Atlas Copco y en el caso particular de nosotros, los más de 67 años de presencia ininterrumpida  y constante y colaborando con la minería de Perú”.

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“La innovación es la que nos marca el camino de todo lo que hacemos  lo que nos motiva para avanzar con paso firme hacia el futuro (…) desde aquí, desde nuestra histórica sede en Santa Catalina, desde nuestras oficinas en Arequipa, desde nuestras operaciones en Condestable, Atacocha y tantos otros lugares de la geografía peruana”, expresó.

Tobar reflexionó sobre los desafíos del nuevo enfoque de la compañía y las oportunidades que se abren en un futuro del que señaló es “sin duda prometedor”, en ese objetivo de la empresa de ser la número uno en todos los  sectores de la industria en la que participe.

DATOS:

  • El  grupo Atlas Copco, con 145 años de historia, revolucionó la minería en los años 60 con el denominado método sueco “un hombre, una máquina”.
  • En el año 2016 registró más de 43 mil empleados repartidos en 90 países y con ventas en 180 países y una capitalización bursátil de 45 mil millones de dólares.
  • Como parte de sus mejores prácticas, la empresa está basada en la diversidad de género, raza, religión y cultura. Cuenta con 460 ejecutivos senior de 53 diferentes nacionalidades.

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