gsppj

Pronta solución. Ministro de Economía anunció que están a punto de cerrar la adenda con empresa canadiense; y que a comienzos del próximo año se podrá desarrollar la producción.

El Ejecutivo, a través del ministro de Economía, Alfredo Thorne, confirmó en una entrevista televisiva que la empresa canadiense Brookfield comprará a Odebrecht sus acciones del Gasoducto Sur Peruano (GSP), aceptando de esta manera la cláusula anticorrupción que tiene ese contrato y que el Estado peruano se negó a modificar a solicitud de los interesados.

 “Ya estamos casi a punto de cerrar. Estamos en negociaciones y probablemente eso salga. No hay cambio en la cláusula anticorrupción, se mantiene tal cual. Hemos llegado a un acuerdo (con Brookfield) el día viernes (17 de diciembre)”, afirmó Thorne en entrevista con Jaime de Althaus, de Canal N.

En esa línea, destacó que este fondo de inversión canadiense es una empresa enorme, pero que además tendría como socio minoritario (en la parte de la construcción del ducto) a Techint. Se debe precisar que la otra parte del accionariado del GSP lo tienen hoy las empresas Graña y Montero de Perú y Enagás de España.

“Pienso que es una mejora sustancial, lo que haríamos desde el lado de Proinversión es una segunda Asociación Público Privada (APP) para hacer la tubería que va a llevar a la masificación del gas, en este caso Arequipa, Puno y Cusco; y la idea ahí es masificar el gas a las familias, a las casas que es a lo que nos habíamos comprometido”, resaltó el titular del MEF.

Agregó que la obra podría retomarse una vez cerrada la adenda de bancabilidad; sin embargo, indicó que esto podría firmarse antes de fin de año, con lo que a inicios del 2017 se podrían retomar las obras de construcción.

Al respecto, Humberto Campodónico, ex presidente de Petroperú, manifestó que le parece muy importante para el país que el proyecto del Gasoducto Sur Peruano siga adelante porque eso permitirá que se masifique el gas en el sur, que haya petroquímica, y que no suban las tarifas eléctricas, como estaba proyectado si es que el gas no llegaba al sur en el año 2020.

“Esperamos que esta noticia que se nos acaba de dar se concrete, porque es un anhelo muy grande para todo el pueblo del Cusco, de Arequipa, de Moquegua, de Puno, saber que se va a democratizar ese gas y va a llevar energía barata a esos pueblos y va a posibilitar su industrialización y desarrollo”, apuntó Campodónico.

Tal como ha estimado el Ministerio de Economía y Finanzas, la inversión en el Gasoducto Sur Peruano, una vez retomado, tendrá un impacto equivalente a 1,5% del Producto Bruto Interno (PBI) y por ello la importancia de echarlo a andar antes del 23 de enero, fecha en que culmina el plazo otorgado por el Estado para presentar la adenda de bancabilidad del proyecto.

La República