El presidente del consorcio precisó que este monto también contempla la construcción de una petroquímica, una planta de fraccionamiento de gas y un poliducto en la zona.
El ambicioso proyecto del Gasoducto Sur Peruano (GSP) a cargo de la brasileña Odebrecht y la española Enagás, permitirá atraer inversiones por más de US$ 15,300 millones para el desarrollo de un polo energético en la zona sur del país.
El director del Área de Ductos de Odebrecht y presidente de consorcio a cargo del proyecto, Rodney Carvalho, precisó que este alto nivel de inversiones también contempla la construcción de una petroquímica, un poliducto y una planta de fraccionamiento.
“La inversión que se amerita a ese tipo de construcción es más o menos la que generó Camisea en su momento, que está en torno a los US$ 15,000 millones”, estimó el ejecutivo durante el III Congreso del Día de la Energía.
Solo la construcción del Gasoducto Sur Peruano demandará una inversión de US$ 4,100 millones y en el mejor de los escenarios estaría concluido en diciembre del 2017, aunque la fecha contractual está prevista para marzo del 2019.
“Es una apuesta compartida por el Estado. La fecha contractual es el 2019, pero todos estamos interesados en que se pueda adelantar”.
“Depende ahora de la voluntad política para sacar adelante el proyecto como sucedió con Camisea, en eso estamos trabajando.
Sin embargo, la construcción de la petroquímica en esta zona dependerá del modelo de desarrollo que elija el Gobierno para impulsar esta industria, dado que aún falta establecer cómo se adquirirá el suministro.
“El Estado no tiene definido qué sistema va a utilizar exactamente, si ellos van a negociar el precio del etano con los productores o si van a dejar que se negocie entre las propias empresas”, refirió Carvalho.
Al respecto, el viceministro de Energía, Edwin Quintanilla, comentó en el mismo foro que el mecanismo todavía se analiza con mucho detenimiento dentro del ministerio, debido a que se busca crear las mejores condiciones para esta industria.
Demanda de gas
De desarrollarse el polo energético en el sur del país, el ejecutivo proyectó que el gasoducto tendría la capacidad para abastecer una demanda de gas de unos 1,650 millones de pies cúbicos al día (mmpcd), aunque iniciaría con un suministro de 400 mmpcd en marzo del 2018.
Bajo este escenario, Carvalho estimó que la mayor demanda en el sur requerirá un aumento de las reservas probadas de gas natural a casi 18 trillones de pies cúbicos (TCF) desde los 14 TCF que existen en la actualidad.
“En el futuro se piensa que con el inicio del lote 58 de CNPC se ampliará la capacidad de producción para los otros proyectos”, manifestó.
Gestión
Antes de fin de año se transferirá estudio ambiental para gasoducto
La transferencia del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) elaborado por la empresa Kuntur a la empresa Odebrecht se efectuaría antes de fin de año, lo que dará pie al inicio de obras del Gasoducto Sur Peruano (GSP), señaló el Ministerio de Energía y Minas (MEM).
El viceministro de Energía, Edwin Quintanilla, afirmó que la dilatación en la transferencia del EIA no paraliza el proyecto, pues la empresa concesionaria viene avanzando en materia logística a través de la compra de los tubos que conformarán el GSP.
“La idea del Estado es cooperar con la realización de este importante proyecto pero sin dejar de lado el cumplimiento de la rigurosidad de las normas”, sostuvo.
Quintanilla explicó que la demora de la transferencia se viene dando debido a implicancias de los ámbitos ambientales, culturales y jurídicos que se manejan fuera del sector, como es el caso de la finalización de contrato del Estado con Kuntur para la construcción del frustrado Gasoducto Andino del Sur (GAS).
“Hay una comisión que se ha creado en esa materia y que viene revisando con detalle el proceso, pues las revisiones tienen que hacerse con profundidad legal, técnica y económica”, declaró tras su participación en el III Congreso del Día de la Energía, organizado por Laub & Quijandría Consultores.
Andina