Gonzalo Quijandria, director de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Minsur

ProActivoGonzalo Quijandría, director de Asuntos Corporativos de Minsur S.A. estuvo en Rumbo a Perumin 35 y habló sobre cómo la empresa peruana con sus prácticas corporativas, basadas en desarrollo socioeconómico y protección ambiental, integra el grupo de las top mundiales.

“Nuestros proyectos han sido enfocados bajo el concepto de la responsabilidad y rentabilidad social para la obtención de la licencia social, concepto que propone una medición del éxito de esta materia en relación al bienestar de las poblaciones existentes alrededor de nuestras operaciones”, informó en declaraciones recogidas por ProActivo.

Manifestó que las acciones en tal sentido han significado un cambio positivo en los ingresos y nivel de vida de las comunidades involucradas, y así poder paliar los lógicos impactos que también se dan en la construcción de un proyecto.

Al respecto, afirmó que las empresas mineras formales responsables saben perfectamente cómo operar sin generar impactos negativos en el medio ambiente que se dan en esta actividad extractiva, “y dejando un gran impacto positivo que se traduce en más puestos de trabajo, más inversión, más canon y en general mayores oportunidades de desarrollo socioeconómico”.

Educación y capacitación para el trabajo 

En tal sentido, remarcó que en materia educativa han construido el Instituto de Educación Superior Tecnológico Público Luis Felipe de las Casas Grieve, “que representa un enorme impacto positivo en la formación calificada de la juventud lugareña”, y que es producto del desarrollo del proyecto Mina Justa.

“Y la visión es que todo joven de San Juan de Marcona debe tener las mismas oportunidades de educación de gran nivel, no digamos en Lima, sino de Toronto, con los mismos instrumentos de enseñanza y la misma currícula educativa de alta calificación”, anotó.

Añadió que ese instituto, tiene una capacidad de 1,200 alumnos, por lo que permitirá atender a jóvenes de todo Ica, del Norte de Arequipa y de algunas zonas de Ayacucho, Huancavelica y Apurímac.

Asimismo, informó que apoyan con becas universitarias en el país a los estudiantes de la zona de influencia, y que las becas al extranjero lo hacen a través de aportes indirectos a otras instituciones que se dedican a esos menesteres educativos.

“Lo otro que hacemos, es la capacitación para la empleabilidad en nuestras operaciones a través de cursos técnicos en alianza con instituciones como Cetemin y Senati, para brindar conocimientos y que los jóvenes tengan más oportunidades de trabajo al ser mano de obra calificada al 100%”, subrayó.

Obras de saneamiento

Señaló que en el sector de saneamiento se ha implementado un proyecto de redes de agua potable que permitirá dar a la población de San Juan de Marcona un servicio de 24 horas al día.

“Lo que falta es que el ministerio de Vivienda culmine las obras de captación de agua en las zonas altas de Nazca para poner en marcha esa obra y poder llevar agua las 24 horas a Marcona”, puntualizó.

También manifestó que tienen pendientes la realización de otros proyectos a través de obras por impuestos, entre estos la conservación de las reservas naturales lugareñas para impulsar el turismo en San Juan de Marcona.

Reducción de huella hídrica y de carbono

Resaltó que están incentivando una serie de proyectos en distintas áreas operativas “para ponernos una meta de reducción de la huella hídrica concreta en nuestras operaciones”.

“Lo que venimos haciendo en los últimos dos años de mediciones, es analizar cuáles son los patrones de consumo que nos permitirán identificar esa meta de reducción hídrica, y paralela a una meta de reducción de la huella de carbono en niveles de alcance 1 y 2 e incluso el 3, y ser consecuente con los acuerdos adoptados a través de las últimas COP”, manifestó.

Trajo a colación el problema de estrés hídrico que tuvieron en Tacna por la escasez de agua, lo cual resolvieron a través de un convenio binacional con Chile, para utilizar las aguas del río azufre, que nace en territorio chileno y que ingresa a territorio peruano por 4 km.

“Logramos un acuerdo para que la mina Pucamarca pueda utilizar agua del río azufre, no apta para regadíos agrícolas ni para consumo ganadero y mucho menos humano, pero es ideal para la utilización en los procesos mineros,” indicó.