Gustavo Navarro

(Foto: GEC)

La reciente crisis de Petroperú ha generado debate sobre la gestión y la necesidad de independencia política en la empresa estatal. Gustavo Navarro, exdirector general de Hidrocarburos, destaca la urgencia de blindar a Petroperú de la injerencia política para garantizar su estabilidad y futuro.

Navarro enfatiza que Petroperú debe seguir el modelo de empresas como ENAP de Chile y Ecopetrol de Colombia, que operan con independencia y eficiencia. La independencia permitiría tomar decisiones empresariales sin influencia política, asegurando una gestión más efectiva.

La crisis actual de Petroperú se ha agravado por decisiones políticas desacertadas, como la pelea con la firma auditora PwC, lo que ha afectado su calificación crediticia y encarecido sus créditos. Además, las políticas para reducir precios y acortar plazos de pago han debilitado su posición financiera.

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Para recuperarse, Navarro sugiere que Petroperú recupere el control del Lote X, una oportunidad para generar ingresos significativos debido a su bajo costo de producción. La transparencia sobre la necesidad del Lote X es fundamental para generar confianza en el plan de recuperación.

El exdirector también destaca la importancia de cambios estructurales, como la elección independiente de altos cargos a través de head hunters, garantizando que los líderes de la empresa sean seleccionados por su experiencia y capacidad, no por su afinidad política.

El presidente de Petroperú, Pedro Chira, es reconocido por su experiencia en la industria y se espera que pueda liderar la recuperación de la empresa. Sin embargo, es crucial evitar cualquier influencia política en su gestión y en la selección de otros funcionarios de alto nivel.

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Los cambios en los estatutos de la empresa, que permiten una selección independiente de líderes, son un paso en la dirección correcta para blindar a Petroperú de la influencia política. Estos cambios buscan evitar la repetición de una gestión marcada por decisiones políticas desacertadas.