(Foto: GEC)
Las violentas manifestaciones en diferentes regiones del país –principalmente Puno– serían consecuencia de antiguos pactos que firmaron el entonces candidato presidencial de Perú Libre, Pedro Castillo, con dirigentes de la minería ilegal. Una de las pruebas fue encontrada en la casa del pasaje de Sarratea, en Breña.
Ese inmueble de seis pisos, que antes era de propiedad del amiguísimo Alejandro Sánchez Sánchez –actualmente prófugo–, permanece custodiado por el Programa Nacional de Bienes Incautados, adscrito al Ministerio de Justicia.
Conexiones con el sur
Panorama reveló que la Fiscalía encontró en el tercer piso, donde se hospedó el profesor durante la campaña electoral, un reconocimiento al “presidente del bicentenario José Pedro Castillo Terrones”.
La distinción fue entregada por el “Comando magisterial minero de campaña de La Rinconada y Lunar de Oro, de la región Puno – Perú”.
Se trata de un compromiso entre el candidato presidencial y dirigentes de una de las actividades económicas más perjudiciales para el país.
Para la Policía Nacional, el sector minero de La Rinconada ha sido el encargado de suministrar a manifestantes el material clandestino y de alta volatilidad que fue utilizado en la quema de comisarías y otras instituciones públicas en Puno.
Además, El Comercio divulgó unos chats del grupo de WathsApp “El Aymarazo”, cuyos integrantes hablan de “quemar la comisaría” y que “La Rinconada va a colaborar con cartuchos”.
Perú21 accedió a un acuerdo firmado en mayo de 2021, durante la campaña, entre Perú Libre –en ese entonces representado por Dina Boluarte– y dirigentes del Consejo Nacional de la Minería Peruana a Pequeña Escala, que agrupa a las Federaciones de Mineros Artesanales de Puno, Cusco, Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, Huánuco, Áncash y Cajamarca.
Más secretos de la casa de Sarratea
En la casa de Sarratea –centro donde se gestaron actos de corrupción en el régimen de Castillo, según la Fiscalía–, también se hallaron un saco azul, de finos acabados, con la firma del reconocido diseñador peruano José Miguel Valdivia, y un liquiliqui (traje típico de Venezuela).
Incluso, se encontraron sobres reservados del Ministerio de Relaciones Exteriores que deberían permanecer resguardados en la sede de Torre Tagle. Estos papeles eran 56 tarjetas de invitación oficiales que nunca debieron salir de la Cancillería.
Castillo también atesoraba en esa vivienda chalecos de campaña del comando nacional de Perú Libre, un varayoc de madera con incrustaciones de metal dorado y un poncho rojo boliviano, que tanto se mencionó durante las manifestaciones.
El poncho rojo del exgobernante lleva una inscripción en el pecho: “Gobierno autónomo municipal Santiago de Huata, recuerdo de Roberto Huaycho Villca, alcalde muncipal del periodo 2015 a 2020 de la provincia de Amasuyos – Bolivia”.
Fuente: Perú 21