Ayer se realizó la Gran Marcha en simultáneo en las regiones de Lima, Arequipa y Cusco para exigir la solución del conflicto que tiene paralizada a la unidad minera Las Bambas por cerca de 50 días, y que viene afectando a más 9 mil trabajadores y 75 mil familias que dependen de esta operación.
La marcha liderada por el Sindicato Único de Trabajadores de la Empresa Minera Las Bambas, contó con el decidido respaldo de diversos gremios e instituciones que se unieron a esta convocatoria, entre estas el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) y la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE).
Dicha concentración tuvo la presencia de los principales líderes del sector minero nacional, entre estos: Roque Benavides, presidente ejecutivo de Compañía de Minas Buenaventura; Raúl Jacob, presidente de la SNMPE; Carlos Diez Canseco, gerente general del IIMP; y Edgardo Orderique, gerente general de MMG Las Bambas, entre otros.
Las operaciones de la mina Las Bambas fueron suspendidas el 14 de abril por la invasión ilegal de sus terrenos por parte de comuneros de Apurímac. Hasta la fecha, se han generado pérdidas alrededor de US$ 400 millones en exportaciones y más de S/ 220 millones en rentas para el Perú y la región Apurímac.
El secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Mina Las Bambas, Erick Ramos, advirtió que el conflicto minero ya ha causado el despido de más 3 mil trabajadores de empresas contratistas. Asimismo, exhortó al Ejecutivo a instalar una mesa de diálogo permanente, a fin de encontrar una solución al conflicto minero.