ProActivo | Jorge Toyama, Socio del estudio legal Vinatea & Toyama, hace un análisis sobre el estado del empleo en el Perú en medio de la pandemia y la inestabilidad política.
El golpe económico provocado por la pandemia del Covid 19 dejó sin trabajo a más de dos millones de peruanos de diversos sectores, según el INEI. A pesar de que el ritmo de vacunación ha aumentado en las últimas semanas, los problemas estructurales de salud pública se mantienen, a lo que se suma la crisis política generada por la incertidumbre tras la toma de poder de Pedro Castillo.
Ante este complicado panorama, Jorge Toyama, Socio de Vinatea & Toyama, señala que el gobierno de Castillo debe concentrarse en impulsar las inversiones para el crecimiento de la oferta laboral en el sector privado.
“El Estado solo tiene el 10% del empleo formal a nivel nacional. La única manera de tener empleo con protección social sostenible es con el sector privado. El gobierno ha dicho que se generarán 1 millón de empleos, pero será en algunos años. Ese empleo no es sostenible en el tiempo, normalmente son temporales y no genera un valor agregado calificado, como una capacitación por ejemplo”, afirmó Toyama en declaraciones recogidas por ProActivo.
Agregó que el 1% de las empresas formales en el Perú pertenecen al sector minero. Precisó que los trabajadores que más ganan en el país son los del sector minero y que se trata de unos 100 mil colaboradores en promedio por año.
Destacó que la minería (formal), que cumple con la legislación, es la que genera mayor PBI. “Además, tiene una productividad laboral alta. Solo en sectores como minería existen normas técnicas específicas sobre seguridad laboral”, indicó Toyama.
Con respecto al sector agrario señaló que este ya superó al sector seguridad como generador de empleo. Sin embargo, tiene altos niveles de informalidad. “Hay 768 mil informales y unos 205 mil formales. La Sunafil ha colaborado en la fiscalización laboral del sector con cruce de planillas, inspecciones virtuales y presenciales con drones, entre otros. La mayor informalidad está en las micro y pequeñas empresas, no en las grandes”, dijo.
Agregó que el sector agrario y el minero han sido menos impactados que otros durante la pandemia -como el de entretenimiento- sin embargo, todavía hay mucho por hacer. “Todavía no llegamos a recuperar los niveles pre pandemia en el sector formal. Los jóvenes son los que más han perdido. Son los primeros en irse por su poca preparación técnica. Los restaurantes siguen golpeados. Según la OIT, los niveles de empleo se recuperarían en el 2023, aún nos falta mucho”, dijo.
Consensos
Toyama instó al nuevo gobierno a abrirse al diálogo social con el objetivo de que sean muchos más los peruanos que logren reinsertarse en la PEA. “Le toca al gobierno tocar puertas y hacer consensos. El Estado debe convocar a los gremios empresariales, sindicatos y al Estado mismo para dialogar en el Consejo Nacional del Trabajo. Todos los proyectos y leyes deben pasar por esta instancia. El Estado debe comprometerse a contar con un Plan Nacional Laboral de corto, mediano y largo plazo. También se debe contar con una política nacional de cumplimiento de la normativa laboral para descentralizar la fiscalización e inversión en inspecciones”, afirmó.
“Se debe pedir al gobierno mucha discusión técnica, escuchar las recomendaciones de la OIT y la Cepal, ver que han hecho otros países a los que les va bien. El respaldo no debe ser político ni ideológico. El Perú necesita unos 5 o 6 millones de empleos sostenibles en el tiempo”, concluyó Toyama.