Carlos Lucioni, gerente comercial de Manuchar

La recuperación de petróleo usando máquinas es probablemente la forma más rápida de limpiar la mayor parte de un derrame; sin embargo, existe un conjunto de herramientas y suministros que ayudarán a cualquier persona a responder ante una catástrofe de manera eficiente, asegura experto de Manuchar. 

El derrame de hidrocarburos en las playas del litoral peruano continúa generando rechazo y cuestionamientos hacia los responsables. Esta catástrofe ambiental que ocurrió en las costas de Ventanilla el pasado 15 de enero, generó la muerte de 461 animales, según el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor). Además, la Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (Digesa) informó que un total de 24 playas han sido afectadas.

Por si fuera poco, el pasado domingo 01 de mayo, ocurrió un nuevo derrame de petróleo en el Terminal Multiboyas de Conchán, en el distrito de Lurín. Toda esta repercusión, exige un análisis de las causas del desastre ambiental y las medidas de prevención que deben implementarse antes que suceda nuevamente.

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De acuerdo con Carlos Lucioni, gerente comercial de Manuchar, existe un conjunto de herramientas y suministros que ayudan a cualquier persona a responder ante un derrame de manera segura y eficiente. “La implementación de un kit antiderrame actúa de manera inmediata en la absorción de petróleo. El aporte es que previene futuros peligros que puedan ocurrir, mantiene el cumplimiento normativo y minimiza el riesgo. Nuestra recomendación es que las compañías cuenten con este tipo de equipos a modo de prevención y también para responder rápidamente ante la posibilidad de un derrame”, aseguró el experto.

Propuesta para enfrentar y evitar desastres ambientales causados por derrames de petróleo

El especialista de Manuchar explica que el “kit antiderrame” se divide en tres tipos de herramientas: la universal, para absorción con todo tipo de sustancia; oil, para la absorción de cualquier derivado de hidrocarburo; y hazmat, para la absorción de todo tipo de químicos pesados.

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Además, señala que dentro las principales acciones a realizar ante un nuevo derrame de petróleo está: reconocer la zona afectada; realizar un registro fotográfico y observación in situ; levantar información de manejo de residuos sólidos; manejo y acopio en el origen; limpieza de espumas del mar con salchichas y paños absorbentes; limpieza de piedras y peñascos con paños absorbentes; extracción o hallazgos de animales muertos; y succión de agua de mar contaminada con petróleo.

“Por otro lado, es necesario llevar un control sobre el manejo de crisis la cual permite instaurar un comité en cada zona afectada con la finalidad de actuar de manera inmediata ante cualquier desastre que pueda ocurrir. Así como la gestión de riesgos humanos, que ayudará en tener un control médico a cada trabajador involucrado con la acción de realizar la limpieza in situ usando debidamente sus EPP’s”, agregó Carlos Lucioni.

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Finalmente, la empresa comenta que la prevención en este tipo de desastres ambientales debe estar acompañada de la responsabilidad de las autoridades, que puedan implementar medidas para fortalecer al sector ambiente. Asimismo, los tomadores de decisiones deben comprender que los temas ambientales son transversales y deben ser considerados en toda política pública.