Miguel Cardozo, presidente de PERUMIN 36; Jimena Sologuren, presidente de PERUMIN 37; y Carlos Diez Canseco, gerente general del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú; hicieron un balance y proyección de la Convención Minera líder en Latinoamérica y el mundo, así también destacaron la urgencia de destrabar los proyectos en cartera.
PERUMIN llevó a cabo su última edición del 25 al 29 de setiembre pasado, en Arequipa. Dicho evento fue presidido por Miguel Cardozo y reunió a más de 65 mil visitantes de 56 países y 23 regiones del Perú, siete ministros, incluyendo al presidente del Consejo de Ministros, doce gobernadores regionales y los embajadores de los principales países mineros del mundo, como Canadá.
“PERUMIN quiere ser la imagen de la minería peruana, y ya está en el calendario minero mundial”, afirmó Carlos Diez Canseco, gerente general del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), asociación organizadora de la Convención Minera.
Durante una entrevista para la revista Cosas, Diez Canseco resaltó que “las operaciones mineras peruanas no tienen nada que envidiar a las de cualquier país del mundo (…) No solo tienen altos estándares tecnológicos, sino también sociales”. Citó, por ejemplo, que la operación minera Quellaveco utiliza el 100% de energía renovable. Y Quellaveco es justamente la última operación minera importante que se ha puesto en marcha en el país.
Por ello, Miguel Cardozo, presidente de PERUMIN 36, reflexionó en el estancamiento de los proyectos mineros en cartera. “Tenemos cuarenta y seis proyectos detenidos, bloqueados”, indicó. “Eso representa una inversión de US$ 53 mil millones. Pero el tema de los permisos es muy enredado y estamos perdiendo el ritmo”.
Según explicó Cardozo, la ralentización empezó en el gobierno de Ollanta Humala, con el caso Conga. Específicamente, afirmó que el doctor Pulgar Vidal complicó las cosas en el Ministerio del Ambiente, desencadenando consecuencias hasta la actualidad. “Hay una generación de burócratas antimineros que ha frenado la exploración minera, lo cual implica frenar el desarrollo del futuro para la minería”, apuntó.
Por otro lado, Jimena Sologuren, presidente de PERUMIN 37, resaltó lo contradictorio de que el Perú tenga una minería formal hiperregulada y una minería informal casi desregulada.
“Por un lado tienes un proyecto formal responsable, con todas las figuras de ISOS y todos los estándares a nivel mundial, y por el otro lado tienes la minería informal, que pasa por una resbaladera. ¿Dónde está la exigencia de estándares de medio ambiente para la minería informal, para no hablar de la minería ilegal?”, se cuestionó.
Asimismo, Sologuren señaló que desarrollar exploración minera también es complicado en el país, porque mientras tramitas el permiso, ya invadieron la zona. Si bien reconoció que el proceso regular de formalización minera es complicado, fue firme en desestimar los conductos rápidos temporales, como el REINFO (Registro Integral de Formalización Minera), ya que no logran resultados reales.
Por ello, los entrevistados coincidieron en que el Estado debe enfocarse no solo en fiscalizar a la minería formal, sino también en el ámbito no formal, donde la situación se agrava cada día involucrando otras actividades ilícitas, que perjudican social y ambientalmente.
Aprovechar la alta demanda de cobre
Actualmente, la demanda de cobre viene en ascenso por la transición energética global, sumada a la guerra entre Rusia y Ucrania, que encarece el combustible y el gas, se impulsará aún más el uso de energía eléctrica para los vehículos. Ello representa una gran oportunidad para nuestro país, que es segundo productor mundial de cobre.
“Tenemos que subirnos a la ola”, refirió Sologuren, “no tenemos derecho a dejar tirada tanta riqueza”. Además, de acuerdo con Diez Canseco, la minería es el 10% del PBI peruano, por lo que el beneficio es indiscutible.
Cardozo explicó que solo ejecutando los proyectos que están en cartera podríamos duplicar nuestra producción y alcanzar a Chile. “Ya estamos segundos con lo que estamos produciendo. De los US$ 53 mil millones, el 70% está en cobre”, añadió.
En esa misma línea, Sologuren indicó que PERUMIN 37 apuntará a ampliar el conocimiento del sector minero formal y responsable a lo largo y ancho del Perú, se pondrá sobre la mesa los temas más relevantes para el desarrollo del sector, que permitan aprovechar al máximo la oportunidad que nos da el cobre y trabajar de la mano con el Estado para que se potencia el desarrollo territorial en beneficio de la población. “Los esperamos en PERUMIN 37, en 2025”, invitó.
Fuente: IIMP