Las compañías mineras más grandes del mundo están a punto de comenzar a revelar cuánto efectivo están obteniendo del boom de las materias primas de este año. Esté atento a las ganancias récord seguidas de los pagos de dividendos deslumbrantes.
Las cinco principales mineras occidentales diversificadas pueden haber ganado un total de US$85,000 millones durante la primera mitad del año, según estimaciones de los analistas, más del doble del nivel de hace un año. Se espera que Grupo Rio Tinto, la primera que informará sus resultados el miércoles, anuncie una ganancia semestral de US$22,000 millones, a la par con su total para todo 2020.
El sector minero ha sido uno de los mayores beneficiarios de los esfuerzos del mundo para salir de la pandemia. Los billones de dólares invertidos en paquetes de recuperación han activado la demanda de productos básicos como el acero, el mineral de hierro y el aluminio, lo que ha hecho subir los precios de forma pronunciada y ha provocado la propagación de las presiones inflacionarias por toda la economía mundial.
Y mientras que los rallies anteriores atrajeron a la industria ambiciosos planes de inversión para construir y expandir minas, esta vez muchos productores parecen contentos de devolver sus ganancias inesperadas a los inversionistas. Las dos mineras más grandes, Rio y su mayor rival, BHP Group, ya han canalizado retornos récord a los accionistas.
Se espera que las cinco empresas mineras más grandes, entre las que también se incluyen a Glencore Plc, Anglo American Plc y Vale SA, informen un récord de ganancias para el semestre finalizado en junio, según un promedio de estimaciones de analistas compiladas por Bloomberg. Rio podría pagar el 60% de sus ganancias subyacentes, según estimaciones de algunos analistas.
“Este debería ser un conjunto de resultados estelar”, dijo Ben Davis, analista de Liberum Capital. “Esperamos dividendos récord de BHP y Rio, mientras que Anglo y Glencore también tienen el potencial de sorprender”.
El mineral de hierro ha sido un gran impulsor de ganancias para los mayores productores. La materia prima más grande del mundo después del petróleo alcanzó un récord en el primer semestre y ha pasado los últimos tres meses rondando los US$200 por tonelada, un nivel no visto en una década. Los precios del acero y el cobre establecieron nuevos récords este año, el carbón térmico también se ha disparado e incluso los diamantes han tenido un resurgimiento.
Algunos precios han retrocedido recientemente en medio de preocupaciones sobre el aumento de los casos de covid-19 y mientras China toma medidas para frenar el aumento de costos. Sin embargo, los precios de las materias primas en general siguen siendo históricamente altos por ahora.
La minera de cobre estadounidense Freeport-McMoRan Inc. dio una pista de qué esperar cuando publicó sus resultados la semana pasada. La compañía saldó US$5,000 millones de deuda en los últimos 12 meses, alcanzando su objetivo meses antes de lo programado y preparando el escenario para un aumento de los retornos para los accionistas.
Anglo American Platinum Ltd. se sumó el lunes. La empresa, 79% propiedad de Anglo American, pagó un dividendo récord de US$3,100 millones que equivale al 100% de las ganancias generales del primer semestre.
Para las empresas de mineral de hierro como Vale, BHP y Rio, promete ser aún mejor. La demanda del ingrediente siderúrgico, especialmente por parte de China, es desenfrenada y la oferta es limitada. China, que representa aproximadamente la mitad de la producción mundial de acero, está produciendo una cantidad récord del metal, mientras que la oferta de mineral de hierro nunca se ha recuperado de dos desastres relacionados con represas en Brasil.
Por supuesto, las empresas mineras no son inmunes a la inflación: las operaciones de mineral de hierro en Australia están lidiando con un fuerte aumento en los costos laborales debido a la escasez de trabajadores. Y los Gobiernos de los países ricos en recursos, especialmente de América Latina, también ven a la industria como una fuente de ingresos adicionales después del repunte de los productos básicos.
Por ahora, sin embargo, las mineras están sacando provecho.
Fuente: Bloomberg