Gonzalo Quijandría

ProActivoPucamarca, mina de oro de alta calidad ubicada en la región Tacna, es el caso de éxito más sonado dentro de la visión minera del Grupo Breca, pues es un modelo de minería moderna, y cuyo impacto le ha permitido desarrollarse sin conflictos desde hace 8 años, tras fuertes protestas iniciales que fueron superadas mediante una estrategia integral adecuada y que la población captó positivamente, destacó Gonzalo Quijandría, Director de Asuntos Internos de Minsur.

Refirió que Pucamarca, situada en el distrito de Palca, en el hito 52 de la frontera entre Perú y Chile, ha sido desarrollada por Minsur desde su etapa de exploración, habiendo comenzado su producción en el 2013 con 117 mil onzas de oro.

“En los años subsiguientes hasta el 2020 ha ido produciendo un promedio de 100 mil onzas anuales y el año pasado 80,215, pese a la paralización que se registró por la pandemia”, precisó.

6 años más de vida

El director de Minsur agregó que la mina tiene unos 6 años más de vida útil, una ley de mineral de 0.48 gramos por tonelada métrica y una capacidad de planta de 21 mil toneladas por día, y cuenta con certificaciones ISO 14 000. Además, evalúa un proyecto para usar agua del Río Azufre.

Resistencia inicial alentada por grupos antimineros

Quijandría recordó que, en junio del 2007, al inicio del proyecto, se registró una violenta movilización de protesta, se tomó el local del gobierno regional y había una prensa muy crítica contra la futura operación minera.

“La ciudad de Tacna estaba tomada por movimientos antimineros y organizaciones sindicales muy activas con una presión muy fuerte hacia el gobierno, solicitando una consulta popular para determinar si Pucamarca iba o no”. añadió.

Dijo que se indicaba que el proyecto representaba un peligro de contaminación contra el Canal de Uchusuma -que provee de agua a toda la población de la ciudad de Tacna- por generación de relaves de cianuro y mercurio.

Estrategia comunicacional fue clave para superar situación

Manifestó que, ante esa situación, Minsur puso en marcha una estrategia implementando canales de comunicación y alianza con actores e instituciones claves de Tacna. “Se desarrollaron mensajes claros y contundentes con explicaciones técnicas y visuales despejando los temores contra el proyecto, contrarrestando la desinformación negativa”, acotó.

Relató que en Tacna había una resistencia a la minería aurífera, pues en la región solo existía la explotación de cobre desarrollada por Southern, “y había temor a una mina nueva distinta, de oro, donde había uso y transporte de cianuro y mercurio”.

En ese contexto se realizaron reuniones con periodistas y todos los actores claves de la región y se organizaron visitas guiadas a Pucamarca, para explicar que se trataba de un proyecto de minería moderna, con visible impacto socio ambiental favorable.

“Se hizo hincapié que no se no generarían relaves y que, además, no se utilizaría el agua de las comunidades vecinas, de los tacneños, y que se contribuiría al desarrollo de la frontera viva con Chile”, anotó.

Rememoró que en esa época la región sur estuvo conmocionada por el “Moqueguazo” y “Tacnazo” del 2008, el “Baguazo” en el 2011, y que se iniciaban las protestas contra Tía María, y Santa Ana en Puno, y otras contra Conga y la ampliación de Toquepala.

Techado del Canal Uchusuma fue de vital importancia

Remarcó que, en medio de ese panorama, y dentro de la estrategia prevista, Minsur decidió techar con concreto el canal de Uchusuma, en la zona que pasa frente a la mina, con una inversión superior a los US$ 5.5 millones.

“El Canal de Uchusuma alimenta de agua a toda la ciudad de Tacna, es parte de los tratados luego de la guerra con Chile y pasa a 2 km del tajo Checocollo de la mina Pucamarca”, detalló.

Afirmó que aquello atenuó el temor de los pobladores “de que usaríamos el agua del canal, y del que no hemos usado ni una gota en todos estos años”.

“La obra se entregó concluida en diciembre del 2014, pero nosotros ya estábamos operando desde el 2013, porque la gente sabía que íbamos a cumplir con ese compromiso que era su principal preocupación”, indicó.

Agua y el Río Azufre

Pucamarca se ha abastecido desde el año 2013, de 7 pozos subterráneos ubicados en la cuenca de la quebrada Vizcachane, el acuífero de los pozos se recarga lentamente, es una zona seca, muy árida, la estructura geológica de la zona no permite una recarga rápida. “No hay muchas lluvias en la zona y por eso desarrollamos un proyecto para usar agua del río Azufre en Pucamarca”, anotó.

Explicó que el río Azufre nace en el volcán Tacora, en territorio chileno, entra a territorio peruano, cruza la frontera y escurre por territorio peruano durante 4km para luego regresar a Chile. Y como su nombre lo dice “Azufre”, es un río cargado naturalmente de minerales y por eso la única actividad que podría usar esas aguas es una mina y la única cercana es Pucamarca.

“El uso de aguas tratadas del río azufre ha sido un elemento importante para Pucamarca y nos ha permitido reducir el uso de aguas subterráneas, intentaremos llevarlas a cero y utilizar únicamente aguas internacionales del río azufre”, declaró.

Recursos para hacer frente a pandemia

Señaló que de la inversión destinada para el techado del Canal Uchusuma, quedó un saldo de US$ 2.7 millones, que se convirtieron en un fondo social para el gobierno regional, y que contemplaba la elaboración de proyectos hídricos.

“Sin embargo solo fueron utilizados US$ 500 mil, pero ante el surgimiento de la Covid 19, se destinaron 2 millones para hacer frente a esta pandemia, y ha permitido que Tacna cuente hoy con dos plantas de oxígeno, balones de oxígeno y un termoreciclador que permite la producción de pruebas moleculares”, resaltó.

Reconocimiento de sociedad a Pucamarca

 

Aseguró que hoy Pucamarca cuenta con el respaldo de importantes instituciones y líderes de la sociedad tacneña que la reconocen como “una mina diferente”.

 

“Se ha registrado un cambio en la percepción de los sectores que antes se movilizaban en contra y luego entendieron lo que es la minería aurífera, cómo funciona, que no genera relaves y no tiene impactos por el cianuro”, puntualizó en el marco del programa de conferencias “Corredor minero del sur: desafíos para el desarrollo de regiones”, organizado por PERUMIN 35, que realiza el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú.