Durante la primera jornada de PERUMIN 36, el director del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, Rómulo Mucho, afirmó contundentemente que la industria minera es un soporte importante en el desenvolvimiento de la economía del país frente a las proyecciones macroeconómicas. Estas declaraciones se dan dentro de una coyuntura donde el Perú no ha podido dar buenas expectativas sobre crecimiento para finales del presente año.
“Desde enero hasta agosto, la economía ha estado estancada, el crecimiento está en negativo. Si no fuera por la minería, estaríamos en -2 o -1.5 %. Realmente, la actividad minera está sacando la cara por la economía nacional, sobre todo si aún hay mucho por hacer”, comentó en exclusiva para ProActivo.
Proyectos a la deriva
El también exviceministro de Minas cuestionó que el gobierno de turno no tenga una mirada clara sobre puesta en marcha de proyectos mineros, por lo que pide eficacia para activarlos.
“Hay que destrabar, reactivar, poner en ejecución muchos proyectos dentro de la cartera. Tenemos muchos que ya están avanzando en trámites, y creo que el gobierno tiene una gran tarea. Ha habido buenas manifestaciones, pero no hay la ejecución efectiva”, refirió.
En esa línea, lamentó la falta de puestos de trabajos por no priorizar ni ejecutar los proyectos del sector. Esta situación, remarcó, complica la situación económica de muchos hogares dentro del territorio nacional, y hace que “la derrota contra la pobreza se vuelve más lejana”.
“Todos debemos ponernos de acuerdo sobre cuál es el país que queremos. El gobierno debe poner en acción las políticas públicas para reactivar los proyectos mineros. Si hablamos toda la vida de lo mismo, no avanzaremos en nada”, aseveró.
El cobre a nuestro favor
Rómulo Mucho ve con optimismo la producción del metal rojo en el país y su consecuente venta al extranjero, especialmente a China, que, afirma, “está en un estancamiento económico, pero la buena noticia es que el cobre se va a utilizar mucho en la transición a energías renovables”.
En esa línea, resaltó que dicho metal vaya a favorecernos, por su volumen de producción, necesario para “darnos pulmón a nuestra economía”.
Asimismo, resaltó las nuevas fuentes de energías, como el litio o el hidrógeno verde, que contribuyen al objetivo de reducir casi por completo las emisiones de carbono se tiene que cumplir en unas cuantas décadas.
“Al 2040 o 2050, ya debe estar a cero el consumo de combustibles fósiles. No es una tarea fácil, pero esperamos que se logre. Depende mucho de la voluntad y decisiones de los países, empresas y de la realidad”, finalizó.