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Desacuerdo. EPS se niega a dotar de agua a población de Paucarpata por mala instalación de tuberías que hizo el gobierno regional en la parte alta del distrito de Paucarpata.

El sueño de más de 20 mil pobladores de la parte alta del distrito de Paucarpata de tener agua potable en sus viviendas se truncó. La inadecuada instalación de tuberías provocó que Sedapar se niegue a prestar el servicio.

La empresa de saneamiento sostiene que el Gobierno Regional no cumplió con lo establecido en el expediente técnico de la obra ‘Mejoramiento del Sistema de Agua Potable  y Alcantarillado de las Partes Altas de Paucarpata”, cuyo costo fue 25 millones de soles.

En el documento se contemplaba la instalación de tuberías (en 15 mil metros) de hierro dúctil, en las líneas de conducción y aducción. Sin embargo, la Región utilizó tubos de acero.

Sobre ello, el gerente regional de Infraestructura del Gobierno Regional, César Ramos Zamora, dijo que las obras se hicieron en la gestión anterior y el caso ya es investigado por Contraloría.

En 2016, ambas instituciones realizaron pruebas técnicas, comprobaron  que el agua que llegaba (desde el manantial de La Bedoya)  a los usuarios contenía óxido por un proceso de corrosión de las tuberías.

Ambas instituciones realizaron varias reuniones de trabajo para encontrar una solución. La primera alternativa planteada por la Región era recubrimiento de las tuberías con fibra de poliéster (PVC)  y después  cambiaron por el revestimiento con mortero de cemento que demorará 6 meses y costará 6 millones de soles.

Sedapar dio opinión favorable a dicha intervención, mediante el oficio N.° 0082 del 24 de enero de 2017.

“Ayer (miércoles), nos mandaron un comunicado, sin sustento técnico y dicen que no es viable y que debemos cambiar la tubería”, señaló Ramos.

Para el cambio total de las líneas de conducción se requiere una inversión de 17 millones de soles y demandará más de un año de ejecución.

El presidente del directorio de Sedapar,  Hugo Aguilar Gonzales, refirió que el revestimiento implica la reducción del diámetro de la tubería. Ello  afectará los niveles de presión.

Mientras tanto la población afectada recibe agua de cisternas de Sedapar que paga la Región. Hasta el cierre de esta nota, ambas instituciones no llegaban a un acuerdo.

Fuente: La República