Las japonesas Sumitomo Metal Mining y Sumitomo Corp dijeron el lunes que aumentaron su estimación del costo de construcción del proyecto de cobre Quebrada Blanca Fase 2 en Chile a unos 7.500 millones de dólares desde los previos 4.700 millones.
El aumento del 60% se debe a que la pandemia de COVID-19 ha retrasado las obras que iniciaron en 2019 y ha aumentado los gastos, señalaron en un comunicado.
La medida también se produce después de que la canadiense Teck Resources, que tiene un 66,67% en la iniciativa, haya revisado el costo estimado hasta entre los 6.900-7.000 millones de dólares, frente a los 4.700 millones del mes pasado, basándose en la suposición actualizada del tipo de cambio y otros factores, según las firmas japonesas.
Teck había dicho anteriormente que esperaba que la QB2, considerada como uno de los mayores recursos de cobre sin desarrollar del mundo, comenzara a producir en 2021, pero ahora tiene como objetivo comenzar la producción inicial a fines de 2022.
La estimación más alta de los japoneses en comparación con la de Teck se debe a su suposición de que el tipo de cambio a futuro es de 775 pesos chilenos por dólar, frente a la suposición de Teck de 850 pesos, dijo un portavoz de Sumitomo Metal. Actualmente, un dólar equivale a unos 916 pesos.
Sumitomo Metal, una minera y fundidora japonesa, posee una participación del 27,77% en QB2, mientras que Sumitomo Corp, una operadora comercial, tiene el 5,56%.
El mayor costo empezará a afectar sus ganancias a partir de 2023, ya que la depreciación de los costos de construcción se contabilizará después del próximo año, cuando se espera que comience la operación comercial, dijo el portavoz de Sumitomo Metal.
Fuente: Reuters