Ya sean para su aplicación en vehículos eléctricos o para cualquier dispositivo electrónico, las baterías de iones de litio requieren diferentes minerales para su fabricación.
Desde su extracción y procesado, así como de la estabilidad en el suministro, depende en gran medida que se cumplan los tiempos que manejan los fabricantes para cumplir sus objetivos con el coche eléctrico.
Hablamos del litio, el cobalto, el níquel, el manganeso, el grafito…, materias primas que, en menor o mayor medida, se utilizan en la fabricación de baterías. Los países productores de estas materias primas no sólo vivirán en los próximos años tiempos con jugosos beneficios económicos, sino que jugarán también un importante papel a nivel político.
Pero, ¿cuáles son estos países? ¿Sabías que el 91% de todo el litio que se produce a nivel mundial proviene de solamente tres? ¿O que casi dos terceras partes de todo el cobalto sale de la República Democrática del Congo?
La Oficina de Eficiencia Energética y Energías Renovables de Estados Unidos ha publicado un informe en el que detalla qué países son los principales productores de los principales minerales empleados en las baterías de iones de litio.
Como su propio nombre indica, el litio es el elemento clave en este tipo de baterías y la práctica totalidad del que se produce a nivel mundial proviene de solamente 3 países: Australia produce unas 18.900 toneladas, el 44% de todo el litio del mundo a fecha del estudio; Chile el 34%; y Argentina el 13%. Entre los tres países suman el 91% del total de 43.000 toneladas que se produjeron en el año 2017.
Otro de los materiales clave es el cobalto, empleado en el cátodo de las baterías, el cual proviene en gran medida de la República Democrática del Congo.
El 59% de todo el cobalto salió del país africano, si bien en los últimos dos años quizá la cifra haya disminuido ligeramente debido a que cada vez son más las empresas que renuncian a comprar el cobalto en este país, el cual ofrece bastantes dudas en cuanto a Derechos Humanos y gestión medioambiental en sus minas.
El resto del cobalto se extrae fundamentalmente en Rusia (5%) y Australia (5%), si bien en este caso su distribución a nivel global es más equitativa.
Por otro lado, Filipinas, Canadá, Rusia y Australia se dividen de forma casi idéntica (en torno al 10% cada uno) la producción de níquel, mineral del que en 2017 se produjeron 2,1 millones de toneladas en todo el planeta.
Australia vuelve a aparecer entre los mayores productores de manganeso: del total de 16 millones de toneladas, la tercera parte salió de las minas de Sudáfrica, el 16% de China y el 14% de Australia.
El país de los kiwis, los canguros y las especies animales venenosas es también uno de los más importantes en cuanto a suministro de materias primas para baterías, con enormes recursos mineros de níquel, manganeso, cobalto y litio.
Por último, toca hablar del grafito, un material que es esencialmente una de las maneras en que se presenta el carbono en la naturaleza. Además de emplearse en las minas de los lápices, el grafito es el material que se emplea generalmente para el ánodo de las baterías.
En el 2017 se produjeron 1,2 millones de toneladas en el mundo, y el 67% del total lo produjo China. Los siguientes mayores productores son India (13%) y Brasil (8%), aunque bastante por detrás del país chino.
En total, todas las materias primas principales para la fabricación de baterías de iones de litio provienen de unos 30 países; países que previsiblemente conseguirán más peso geopolítico en los próximos años conforme aumente la producción de baterías y, por tanto, la dependencia de estos materiales para el desarrollo de los vehículos eléctricos.
Fuente: Mining Works