Henry Polanco Cornejo UNSA

La minería cumple un papel clave en el fortalecimiento de la educación científica y el desarrollo social del país. Así lo señaló Henry Polanco Cornejo, vicerrector de Investigación de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa (UNSA), durante su participación en la última edición de Rumbo a PERUMIN, evento organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).

Durante su exposición, Polanco subrayó que, gracias a los recursos provenientes del canon y las regalías mineras, la UNSA se ha posicionado entre las diez mejores universidades del país, y como una de las más destacadas fuera de Lima. En los últimos cuatro años, la casa de estudios ha recibido más de S/ 350 millones, de los cuales S/ 175 millones se destinaron a proyectos vinculados al medio ambiente, turismo, comunicaciones y fortalecimiento institucional.

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Entre las principales, se encuentra la implementación de 25 laboratorios de investigación, de los cuales 13 ya están plenamente operativos y 12 en proceso de ejecución. Asimismo, la universidad ha invertido más de S/ 70 millones en equipamiento científico, permitiendo que docentes y estudiantes participen activamente en proyectos de investigación aplicada.

Uno de los ejemplos más destacados de investigación que se mencionaron durante el encuentro, fue el desarrollo de bio humedales para la descontaminación de ríos afectados por metales pesados en el sur del país. “Estas iniciativas demuestran que la articulación entre la academia y el sector minero no solo es posible, sino fundamental para mejorar la calidad de vida de las comunidades”, afirmó Polanco.

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Por otro lado, el vicerrector también aprovechó su participación para advertir sobre los efectos nocivos de la minería ilegal, una práctica que sigue generando pérdidas económicas y daños ambientales significativos. “No es posible que se sigan perdiendo millones por oro no declarado. Estamos dejando de percibir ingresos que podrían destinarse a salud, educación y seguridad, mientras seguimos tolerando un daño ambiental irreparable”, expresó.

Finalmente, hizo un llamado a reforzar la colaboración entre la empresa privada, el Estado, las universidades y la ciudadanía; y recalcó que espacios como la próxima convención minera, PERUMIN 37, deben aprovecharse como plataformas para promover consensos en torno al desarrollo sostenible, integrando a todos los actores sociales en una agenda común.