Luis Rivera - VP Gold Fields

ProActivoLuis Rivera, vicepresidente de Gold Fields las Américas habló de diversos temas concernientes directamente a las necesidades que tiene la industria minera en el contexto nacional e internacional. No se escapó el tema climático cuya exigencia viene creciendo en la agenda empresarial global ni las nuevas medidas anunciadas para el sector minero.

Debido a la mayor demanda de los metales base, este mercado realmente crecerá, dijo Rivera, tras explicar que ello se debe al incremento de la economía verde en el planeta, sin que represente necesariamente un nuevo boom en el precio de los metales. Una evidencia, observó, está en el sostenido crecimiento de la fabricación de los vehículos eléctricos en un país gigante como es China.

El futuro está allí, el reto está en cómo el Perú se sube a ese futuro, reparó.

Al referirse al rol que puede tener la minería para responder a la crítica situación que atraviesa el país, recordó que la minería es una industria de largo aliento, de gran gasto de capital, de desafíos y de ingeniería compleja. “Cada año que pasa, cada década que pasa, se hace mucho más desafiante. Los yacimientos se van haciendo más difíciles de acceder, las leyes van bajando y hay que llegar a zonas más profundas de las minas. Entonces, ¿cómo subirnos a ese futuro?”, reflexionó durante su intervención en Rumbo a Perumin 35.

Trajo a colación que la minería es una industria de riesgo, que va cambiando y demanda intenso capital. “Si no se ve la economía de la minería, en un entorno competitivo, va a ser muy difícil que esos proyectos en los portafolios se realicen”, comunicó.

“Muchos de esos proyectos a lo mejor no van a poder realizarse, estamos hablando de proyectos que están incluso, al nivel de prefactibilidad, en exploración. Para que un proyecto de exploración llegue a ser uno de prefactibilidad, factibilidad y se ejecute. Tiene que pasar por muchos, “gates” (puertas), muchas condiciones para que los directores de las empresas los aprueben”, afirmó.

“El 30% de cero, es cero”

En ese sentido, Rivera pidió seguir la recomendación de contextualizar los proyectos en cartera en el futuro, para entender cuán factible es la realización de los mismos y cuánto beneficio se puede realmente capturar. A partir de allí, recién podrá discutirse los temas impositivos.

“Si empezamos a discutir temas impositivos sobre proyectos de un futuro que a lo mejor no existe, estamos dividiendo porcentajes de una torta que aún no existe, 20% o 30% de cero, es cero”, acotó.

Rivera invitó a comprender bien el largo plazo de la industria minera del país, en el contexto global y local. Es muy difícil llevar los proyectos mineros a la realidad, dijo.

Dos líneas de competitividad, fueron resaltadas por el empresario: el potencial geológico y el de infraestructura. Recordó que los yacimientos, en su gran mayoría se ubican en los Andes; y mientras no se pueda trasladar esos recursos a los mercados mundiales se quedan allí, sin dar beneficios. Por lo que el potencial geológico sin la infraestructura adecuada no se transforma en riqueza.

“Mientras ese mineral se encuentre en los cerros y no seamos capaces de extraerlo de una manera económica y traerlo hacia la costa y ponerlos en los mercados mundiales, ese potencial geológico se quedará en el cerro y podría estar 10, 15, 20 o 100 años y pasar generaciones sin tomar beneficios de esa riqueza mineral”, expresó.

Precisó que cuando se habla de infraestructura, comprende carreteras, líneas eléctricas, líneas de comunicación, líneas telefónicas, etc. El punto más crítico, consideró, es extraer el mineral hacia los mercados globales.

Manifestó que por lo expuesto por el ministro Merino, la intención del Estado es la de promover líneas férreas, de las cuales aclaró que, si bien pueden traer múltiples beneficios, requieren masa crítica suficiente para pagar la inversión puesto que no son económicas.

“La presencia de las grandes minas, grandes yacimientos, serían los fundamentos base que podrían -como insisto- costear el gran gasto del capital que estas líneas férreas van a necesitar. Y si esas líneas férreas no están unidas a puertos, siguen siendo, de alguna forma, incompletas”, afirmó.

Finalmente remarcó que dichos puertos tendrán que estar a su vez conectados a los mercados globales a través de acuerdos de comercio internacionales y tratados de libre comercio, para que el país se mantenga competitivo y los productos mineros lleguen de manera competitiva hacia sus destinos.