Foto: Andina

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La fortaleza del sector servicios y el mercado laboral evidencian un mejor desempeño de la economía de Estados Unidos. Apuestas a caída del oro se han incrementado 59%.

La Reserva Federal ha asustado a los inversores de oro.

Los precios registraron su mayor caída semanal en tres años después de los duros comentarios de varios funcionarios de la Fed que encendieron los temores de que el banco central pronto elevará la tasa de interés de Estados Unidos. Los inversores se están preparando para más caídas en los precios del oro, recortaron sus apuestas sobre un rally alcista de los lingotes a un ritmo más rápido desde finales de mayo.

El interés abierto en los futuros del oro cayeron en picada. Las tasas de interés más altas reducen el atractivo de los metales preciosos como depósito de valor.

El mercado de trabajo de EE.UU. resistente y las ganancias del sector servicios apuntan a que la expansión económica puede continuar incluso si la tasa de interés sube, poniendo freno a la necesidad de activos de refugio.

“La interpretación de los datos del mercado laboral nos deja con la Fed actuando hacia fin de año, probablemente, y eso va estar apoyando al dólar, presionando el oro”, dijo Rob Havvorth, de US Bank Wealth Management.

La posición compradora neta en los futuros del oro y opciones cayó 22%, a 205,176 futuros y opciones para la semana terminada el 4 de octubre, de acuerdo a los datos de la Commodit y Futures Trading Commission. Fue la mayor caída desde el periodo terminado el 24 de mayo.

Las tenencias en corto o apuestas sobre caídas de precios, aumentaron 59%, el mayor aumento desde mayo del 2014.

El oro cayó el viernes pasado por novena sesión consecutiva y alcanzó breve mente un mínimo de cuatro meses.

Los futuros del oro en Estados Unidos para entrega en diciembre cerraron el viernes con una baja de 0.1%, a USS
1,251.90 la onza.

Empleo en EE.UU.

El crecimiento del empleo en EE.UU. se desaceleró inesperadamente por tercer mes consecutivo en setiembre y la tasa de desocupación aumentó.

Las nóminas no agrícolas aumentaron en 156,000, por debajo de la cifra revisada de 167,000 empleos creados en agosto, mientras que la tasa de desempleo subió un décimo de punto porcentual a 5%.

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