Por: DIANA RAKE, Managing Partner Diana Rake & Associates.
No hay duda que la generación Y (1981-96) y la generación Z( 1997-2012) saben que su futuro está en juego.
No conocen al detalle los 17 objetivos de las Naciones Unidas para el desarrollo sostenible, pero creen en el desarrollo inclusivo y la armonía con el medio ambiente.
También sabemos que nacieron digitales y que un mundo sin tecnología les sería utópico. Si bien la variedad de carreras y oficios cambiara, la oferta es tan grande que estudiar ciencias de la tierra (minería, geología, metalurgia, energía geotérmica, de petróleo) no es muy “sexy” en los países desarrollados.
En Perú todavía hay mucho interés por estas carreras ya que proporcionan una esperanza de crecimiento económico-social descentralizado.
Una minería moderna proporciona continuidad a la tecnología porque sin minerales esta no podría darse. Hay una voluntad genuina en el país de hacer minería responsable liderada por los jóvenes que estudian estas carreras.
La visión compartida en este año de desafíos sanitarios, políticos y económicos podría ser un movimiento positivo para el crecimiento de un país moderno y plural. Es momento de que busquemos espacios para que los jóvenes conversen transversalmente y sepan más de minería, agro, agua, pesquería, energía entre otros. ¡Ellos son la esperanza de nuestro país!
Fuente: Gestión