ProActivo | El cierre de minas integra el ciclo de vida de una mina y forma parte de su gestión sostenible. Además, requiere importante inversión y colaboración de las comunidades, a lo que suma un factor muy importante: una adecuada planificación. Óscar Osores, gerente de Cierre de la mina Pierina, de Barrick Gold, habla sobre el primer cierre de minas de una gran mina en Perú.
“El cierre de minas requiere de un nivel importante de inversión, colaboración con las comunidades, un respeto al medio ambiente. Como tal, es necesario, al igual que en todo gran proyecto, llevarlo a cabo con una adecuada planificación, proyección y con un cronograma realista que permita alcanzar los objetivos”, manifestó Óscar Osores en declaraciones recogidas por ProActivo en el marco de su presentación, “Transformando Pasivos Ambientales y Cierre de Minas en Oportunidades que Generen Valor“.
El experto dijo que los costos deben ser considerados a nivel de ingeniería de detalle. Por ejemplo, explicó que en lo técnico es relevante “reconformar el componente de pila de lixiviación para que, de acuerdo a los requerimientos de la normativa peruana, esté en capacidad de soportar un sismo (en periodos de retorno) de alrededor de 500 años”.
Remodelar dichas estructuras implica un proceso exhaustivo de diseño y construcción, donde se deben tomar en cuenta aspectos como la estabilidad física y química de los taludes, así como la gestión de aguas.
“A la par del diseño de los taludes, de las banquetas, tenemos que diseñar una red de canales, canaletas rápidas, para conducir el agua y soportar eventos de máxima precipitación”, agregó.
Osores subrayó que el manejo del agua es fundamental, no solo durante la operación de la mina, sino también en la etapa de cierre, donde el objetivo es asegurar que el agua de contacto sea tratada adecuadamente para cumplir con las normas ambientales.
“Los sistemas que se diseñan hoy tienen que estar en la capacidad de poder asumir los cambios que se van a generar no solamente en la cantidad de agua, sino también en su calidad”, afirmó.
Etapa de cierre final a mediados del 2026
El gerente de Cierre de Mina Pierina hizo hincapié en que muchos de estos proyectos están en desarrollo, presentando imágenes del antes y después de las infraestructuras y la configuración de las pilas de lixiviación, lo que muestra un cambio significativo hacia un cierre más sostenible. “Mostramos un poco el antes y después (aunque todavía es un trabajo en proceso) cómo ha ido cambiando la configuración de la pila de la lixiviación desde la etapa de operación hasta ya contar con una geometría totalmente diferente”, destacó.
“Nuestra etapa de cierre final está programada para culminar a mediados del 2026. Una vez que alcancemos este hito, pasaremos, de la etapa de cierre final a la etapa de post cierre que está proyectada por 30 años”, informó.
Además, Osores habló sobre el proceso de demolición de la infraestructura asociada a la mina, enfatizando que la seguridad es un pilar fundamental en todas las operaciones. “Como toda empresa minera, uno de nuestros principales pilares es la seguridad. Dentro de todo el proceso hay oportunidades de innovación, de optimización”, indicó.
Gestión Social: Vital para el éxito del Cierre
Más allá de los aspectos técnicos, Osores subrayó la importancia de la gestión social en el cierre de la mina.
“El cierre social es el modelo que adoptamos en Pierina para gestionar las relaciones con las comunidades en el marco del proceso de cierre”, explicó.
Este enfoque implica una comunicación constante y efectiva con las comunidades, así como el fortalecimiento de capacidades locales. “Lo que buscamos es trabajar en dos ejes. Primero, mediante comunicación, y luego fortalecimiento de capacidades”, añadió. A través de visitas guiadas y carpas informativas, Barrick busca mantener a las comunidades informadas sobre los avances del cierre y generar un clima de confianza.
Osores también mencionó la importancia de contar con un espacio donde las comunidades puedan expresar sus preocupaciones. “Tenemos una oficina de información permanente en una zona cercana a la mina y cercana a las poblaciones, en las cuales ellos pueden acudir y expresar sus preocupaciones, los temas de interés, reclamos”, detalló.
El experto manifestó que en la actualidad Barrick trabaja con las comunidades para identificar oportunidades de implementar, por ejemplo, “miradores turísticos, museos, aulas de clase, incluso zonas de esparcimiento, los cuales pueden ser eventualmente transferidos a las autoridades locales o a las comunidades para un posterior uso que le genere valor también al cierre”. Asimismo, consideró que una tendencia que se viene en los cierres de mina, es buscar nuevas alternativas para el uso de la infraestructura en el marco del post cierre.
La liberación de garantías
Con miras a la liberación de garantías involucradas, la empresa trabaja para obtener la certificación final del cierre de mina, con la consiguiente liberación de las garantías involucradas. “Es cómo debemos culminar la etapa de cierre final”, puntualizó.
El gerente de Cierre de Mina Pierina enfatizó la necesidad de un presupuesto adecuado y una planificación realista para asegurar el éxito del cierre: “Es importante definir las medidas de cierre y los conceptos, los trabajos de forma temprana, idealmente durante la etapa de operación de la mina, porque hay oportunidades de sinergias”.
En esa línea reiteró a ProActivo la importancia del cierre de mina. “Es clave. Las comunidades son nuestros principales grupos de interés. Nuestra operación está adyacente a un gran grupo de comunidades que están atentos a nuestra labor”, afirmó. Asimismo, destacó que un cierre responsable y colaborativo puede generar beneficios a largo plazo para las comunidades circundantes, requiere una gran cantidad de trabajo, de inversión, colaboración con las comunidades y un respeto al medio ambiente.
Felicitar por las gestiones realizadas con responsabilidad social