Armando Gallegos, presidente del directorio de Gerens

Armando Gallegos, presidente del directorio de Gerens.

ProActivo | El Balanced Scorecard – BSC aplicado en la actividad minera puede contribuir a generar un valor social, económico y medioambiental, con un beneficio para todas las partes interesadas, destacó Armando Gallegos, presidente del directorio de Gerens.

En el Perú, la minería es el motor del crecimiento económico. Genera millonarios dividendos para las empresas y también para las regiones por concepto de canon minero, sin embargo, la actividad extractiva se encuentra estigmatizada porque no todos son beneficiados.

 “La minería, contribuye económicamente, genera empleo, (representa) 13% del PBI, sin embargo, desde fuera la visión no es igual. En las principales regiones mineras del Perú: Cajamarca, Áncash, Arequipa, Pasco, Cusco, Tacna, Moquegua y Apurímac, hay una posición crítica a la minería. ¿Cómo resolver esa paradoja?”, cuestionó Gallegos.

Al respecto, el académico propuso un instrumento de gestión empresarial que puede ayudar a las empresas a superar dicha situación. Se trata del “tablero de control estratégico (Balanced Scorecard – BSC), una herramienta ampliamente utilizada en el sector de consumo, telecomunicaciones, salud, energía, minería, servicios financieros, el Estado, entre otros”, afirmó.

Explicó que el Balanced Scorecard o BSC de una empresa sostenible brinda un triple resultado que atañe al valor social, económico y medioambiental de la actividad a la que se dedica. Sea para la minera, proveedores, comunidades y otros actores, de ese ecosistema minero.

Ilustró que, en ese contexto, existe una perspectiva financiera, otra del cliente, otra del proceso y la tecnología, otra de recursos humanos y una social y de medioambiente. “En esta última hay que asumir el liderazgo en transparencia dentro del sector, manejar el impacto social en áreas de influencia, ser protagonista en cuestiones hídricas y manejar la ecoeficiencia, la salud ocupacional y evitar accidentes. Todo esto se puede reimaginar al ecosistema minero”, señaló.

Detalló que un BSC integra las estrategias de las empresas, las comunidades, los proveedores, los gobiernos locales y las ONGs. “Se busca implementar estrategias ‘ganar- ganar’, que beneficien a todos los participantes del sistema”, remarcó.

Generando valor

El presidente de Gerens indicó que si bien hay casos en los que una empresa minera genera valor, crea empleo y paga impuestos para que el Estado proporcione servicios, lamentablemente no siempre el Estado cumple con entregar dichos servicios, lo que se transforma en rechazo a la minería.

“Los impuestos que pagan las empresas regresan como canon, pero no siempre favorecen a todos los actores. Como muchos no ven los beneficios de la minería consideran que no es una buena opción para ellos y cuando hay elecciones votan por opciones distintas. La minería necesita crear ecosistemas inclusivos”, afirmó.

Qué busca cada grupo de interés

El experto insistió en que todos los grupos de interés de la minería deben alcanzar un valor social, económico y medioambiental. Con respecto a las comunidades, señaló que lo que buscan es obtener empleo directo e indirecto y en óptimas condiciones ambientales. Con relación al Gobierno, está orientado a promover el bienestar de la población, el desarrollo regional y la preservación sostenible del medioambiente. Mientras que para los proveedores locales el objetivo es lograr inserción en la cadena de abastecimiento de las mineras. Las empresas mineras buscan obtener la licencia social y retornos con buen desempeño social y ambiental; y finalmente, los compradores desean asegurar un abastecimiento de minerales seguro, de alta calidad, a tiempo y confiable.

“Se deben desarrollar nuevas tecnologías y enfoques para ser más eficientes y productivos a través de alianzas. Los nuevos procesos de sostenibilidad e innovación crean equipos y procesos que permiten optimizar las operaciones para mejorar el manejo ambiental de las mismas. De esa manera las comunidades obtienen oportunidades de empleo. Al beneficiarlas, obtenemos beneficios para el medioambiente y un mejor ingreso sostenido”, declaró Gallegos.

El experto también fue enfático al señalar que toda región del país necesita infraestructura, servicios, educación, salud, entre otros beneficios. Por lo cual es importante seguir impulsando la inversión privada en todos los niveles.

“Gran parte del valor que se genera en una sociedad proviene de la inversión privada. Hay que atraerla y romper ese mito en algunas regiones de no querer hacerlo. No solo la inversión minera, sino todo tipo de inversión privada que hace sinergia con la minera, como la turística y energética, entre otras”, señaló.

Gallegos citó a Mark Cutifani, CEO de Anglo American, quien dice que “la industria minera está presionada a tener un cambio transformacional”.

Explicó que el CEO de Anglo American ha juntado una organización que denominada “Catalyst for mining”, la cual busca repensar la manera de cómo se hace la minería. Con el fin de adecuar el paradigma de la industria minera a nivel global. “El problema del Perú se presenta en otras partes del mundo, en Canadá y Australia por ejemplo. Aunque no es tan dramático como en Perú”, precisó.

“Cutifani dice que hay que cambiar el paradigma de la industria minera de ser una industria extractiva a ser un socio para el desarrollo. Esto ya comienza a verse en Anglo American Quellaveco. En su propósito que se muestra en su página web señalan que hay que reimaginar la minería, para mejorar la vida de las personas”, concluyó.