Víctor Gobitz, presidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, sostuvo que este año la industria minera tiene protocolos sanitarios robustos que ha minimizado el riesgo de contagios del covid 19 en la fuerza laboral, permitiendo reiniciar operaciones sostenidas, pronosticando que al término del 2021 se tendrá una producción similar o mejor a la que obtuvo el 2019 sin pandemia.
“El año 2020, cuando se declaró la pandemia, los países mineros con los cuales competimos, Chile, Brasil, Canadá, Australia y Estados Unidos, declararon su actividad minera como esencial. no pasó eso en el Perú, la industria minera paró aproximadamente dos meses”, observó.
En diálogo con RCR, Red de Comunicación Regional, manifestó que la perspectivas para fines de este año será positiva por el buen desempeño de la producción minera alentado por el inicio de operaciones de Mina Justa la ampliación de Toromocho, y la continuación del proyecto Quellaveco.
Resaltó que el Perú tiene una geología muy favorable y lo segundo es el ecosistema minero. “Cuando uno habla de ecosistema minero no solo se habla de empresas mineras sino también de proveedores de servicios, contratistas, fuerza laboral técnico y gerencial”.
En cuanto a los temas desfavorables mencionó tres, “tenemos infraestructura más limitada que en otros países. El segundo es el exceso de tramites. El tercer tema es la demora que tomar llegar a acuerdos”.
Puntualizó que se debe trabajar en esos tres factores para lograr el pleno potencial de la industria en el país.
Resultados de la elección presidencial
Respecto a los resultados de la elección presidencial del 11 de abril, el ingeniero de Minas Víctor Gobitz, sostuvo que el candidato de Perú Libre, Pedro Castillo, ha obtenido la preferencia de una primera minoría, pero la mayoría de la población ha votado por el promercado y el emprendimiento privado.
También señaló que la industria minera espera que la persona que gane la segunda vuelta convoque a todas las fuerzas políticas para lograr consensos con vías a fortalecer el rumbo económico del país y resolver la crisis sanitaria.
“En los resultados finales hay un fraccionamiento de la votación. La primera minoría la ha obtenido Pedro Castillo. Cualquier discusión sobre el rumbo económico para reactivar la economía y resolver el tema sanitario va a requerir mucho consenso. Si uno comienza agregar la participación de las otras minorías, hay un gran sector de la población que ha votado por el promercado y el emprendimiento privado. Hay que tener el optimismo que logremos encontrar el consenso para el desarrollo común”, dijo.
Remarcó que la industria minera espera que el ganador o la ganadora de la segunda vuelta sea un gobierno convocante, que dialogue y que logre consensos. “La polarización política ha causado más daño y al final pierde el país y las personas más vulnerables. Eso es lo que deberíamos esperar y tener una lección aprendida. El Congreso está fragmentado y requiere que haya un consenso sobre el rumbo económico del país. Eso es lo que tenemos que alcanzar a la vez que resolver la crisis sanitaria”, indicó.
“La Constitución del 93 define los roles del Estado y la industria privada. Eso se puede discutir, pero requiere llegar a acuerdos consensuados. Lo segundo es que el Perú tiene acuerdos de libre de comercio con las principales economías del mundo. En un estado de derecho los cambios se consensuan y no se imponen. Es importante que la persona que llegue a la presidencia tome en cuenta esto. El Perú no es una autarquía y tampoco una monarquía. El que gane la elección tiene que regirse en el marco del Estado de derecho”, explicó.
Manifestó, asimismo, que el problema raíz que tenemos que resolver es levantar el estándar de la gestión pública. “Si queremos ser parte del OCDE tenemos que lograr que levante su nivel de gestión y que empareje lo que se ha logrado en la industria privada. Ese es un desafío de país, para que la población visualice el beneficio que se viene generando a través de la industria minera. Creando mas impuestos lo que vamos a hacer es perder competitividad”, afirmó.
“Mejorar la gestión pública en los gobiernos regionales y locales pasa por tener talento, no convertirlo en un botín político y transparencia para evitar cualquier acto de corrupción. Tienen que ver planes de largo plazo que se puedan implementar progresivamente, para que la población pueda visualizar hacia donde se dirige el desarrollo”, enfatizó.
Fuente: RCR