Pedro Castillo - Foto Presidencia - ProActivo

El flamante presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, encabezó las celebraciones del Perú Bicentenario, en Lima, en el Congreso de la República. Juramentó por una nueva constitución y aseguró que su periodo será por el periodo 2021- 2026.

El mandatario recordó a los antiguos peruanos, desde Wari hasta el Tahuantinsuyo y durante su discurso reiteró su voluntad de convocar un referéndum popular para una Asamblea Constituyente. “Nunca se hará tabla rasa de la legalidad”, aseguró.

“Muchas de las disposiciones vigentes solo benefician a las grandes transnacionales”, argumentó por lo que dijo también que la nueva Constitución permitirá que se hagan nuevos contratos.

Anunció que presentará ante el Congreso de la República un proyecto de ley para reformar el artículo 206 de la Constitución Política del Perú que impide una nueva constitución.

Rentabilidad social de los proyectos mineros

Castillo anunció que habrá promoción de la inversión y también “una nueva forma de hacer proyectos en el Perú”.

Reconoció que el Perú es un país de milenaria tradición minera y agrícola; sin embargo, dijo que tiene una crítica en el sector de minería, energía e hidrocarburos.

“Implementaremos el criterio de rentabilidad social que es superior a la licencia social” afirmó, tras manifestar que todo proyecto debe contribuir entre otros, con “dinamizar la economía local, regional y nacional”.

Agregó que “la inversión foránea, extranjera o extra regional es un medio para difundir tecnología en las áreas receptoras”, lo que implica el fortalecimiento de las instituciones pertinentes para que se haga realidad el aprendizaje local.

Otro aspecto minero que trató fue el del cierre de minas, al precisar que “toda intervención debe cuantificar certeramente el cierre de minas y otorgar garantías reales sobre cualquier pasivo ambiental”.

Añadió que los actores deben acondicionarse a cada escenario y no al revés. “Los pueblos y las organizaciones territoriales deben participar activamente en la gestión de su desarrollo, si un proyecto no tiene rentabilidad social, simplemente no va”, expresó.

“El estado peruano enfrenta a difíciles retos a corto y mediano plazo, necesita una nueva forma de hacer minería en su territorio. En un escenario de paz con justicia social donde cada pueblo sea protagonista de su destino”, acotó.

Orden

En otro momento dijo que, en lo referente a poner orden en la minería, “esto significa reglas claras, escenarios sin sorpresas para los actores. Utilizando las buenas prácticas que se dan en otros escenarios, expulsando a la corrupción, sincerando y acotando procedimientos que faciliten la exploración, la explotación, el control y el cierre adecuado de cada proyecto”.

“Haremos lo posible para producir más y con mayor valor agregado”, sentenció.