Felipe Cantuarias, presidente de la Sociedad Peruana de Hidrocarburos

Cantuarias afirmó que esta situación obliga a Petroperú a tener que compensar la menor producción local de petróleo con crudo importado. 

La situación del Oleoducto Norperuano –que lleva 17 días bloqueada ante la rotura del ducto ocurrida el último 27 de noviembre y sin posibilidad de reparación por la oposición de dos comunidades (Mayuriaga y Chapis) en Loreto que impiden el ingreso de los técnicos de Petroperú– genera alarma y preocupación en la Sociedad Peruana de Hidrocarburos (SPH), por los impactos económicos y ambientales que trae esta situación.

Felipe Cantuarias, presidente del gremio, advirtió que la paralización del Oleoducto Norperuano viene generando un perjuicio económico al bolsillo de los peruanos, por los sobrecostos de la importación de crudo para compensar la baja producción local.

“El bloqueo del ducto está generando un perjuicio para todos los consumidores dado que la menor producción de crudo, obliga a Petroperú a tener que compensar esa menor producción local con crudo importado, que genera un mayor sobrecosto de entre US$ 1 a US$ 2 por barril, que al final se terminará trasladando a todos los peruanos”, alertó a Gestión.pe.

En esa línea dijo que como representante del gremio petrolero, se encuentra “sumamente preocupado” por esta situación que está afectando de manera muy drástica el abastecimiento de crudo, que es el principal insumo para la venta de combustible (gasolina) en el país.

Pero no solo este conflicto social golpea al abastecimiento de petróleo sino también a la producción local. “El hecho de que el Oleoducto Norperuano no funcione, genera que varios de los lotes de producción dela selva estén también paralizados –entre ellos el Lote 192– que es uno de los yacimientos más importantes que tenemos”, subrayó.

En tercer lugar está afectando a la región Loreto –afirmó Cantuarias–porque al haber menor producción, se está produciendo un menor pago de regalías y, por consiguiente, menos canon. “Ante lo cual consideramos que se debe preservar el principio de autoridad dado que el Oleoducto Norperuano es un activo estratégico, por lo que el ‘sabotaje’ que ha sido objeto viene generado un daño ambiental que constituye un delito muy grave”, anotó.

Por ello, la SPH exige que se procese penalmente a los responsables de la rotura del ducto, “Independientemente de si esto ha sido generado por una protesta social, no hay ninguna razón para que un descontento social pueda llegar al ‘sabotaje’ y a la destrucción de la propiedad pública que tiene un fin fundamental para todos los peruanos. Exigimos que se restaure el principio de autoridad”, puntualizó.

Remarcó que es el Gobierno es el que tiene que poner orden, para que se permita y garantice el ingreso de las cuadrillas de Petroperú en la zona para poder contener el derrame originado.

“Este principio de autoridad, debería ir acompañado del diálogo y la solución a los problemas de las comunidades de la Amazonía peruana, debido a que persiste un alto nivel de descontento que no justifica ningún acto de violencia y menos de sabotaje contra una infraestructura estratégica”, recalcó.

Fuente: Gestión