Alexandra-Almenara

ProActivo | La necesidad de la minería de ser más resilientes, por la pandemia, aceleró la velocidad en las inversiones y los cambios hacia la automatización. “La minería no tiene una reputación como sector en adoptar fácilmente las nuevas tecnologías, al punto que Global Innovation Study la clasifica en el puesto 30 de 53 sectores en término de inversión  para innovación e investigación”, precisó Alexandra Almenara, Vicepresidenta y Gerente General de Medio Ambiente y Sostenibilidad de Ausenco en Sudamérica.

La ejecutiva anotó que, sin embargo, la pandemia ha obligado al sector a tener que acelerar la inversión en esta materia, para estar mejor preparado frente a toda crisis. “Y también ha dado oportunidades interesantes para la sostenibilidad y hacer énfasis en que este concepto vino para quedarse. Es más, los inversionistas del sector minero cada vez más empujan el cumplimiento de aquellos compromisos ambientales, sociales y de gobernanza dentro del sector”, apuntó.

Perú entre los países más afectados por el Covid-19

Aseguró que el Perú ha sido uno de los países más afectados por la pandemia a nivel global, y que la oficina de Ausenco Perú fue la más impactada de todas las filiales que tienen en el mundo.

“En otros países no se detuvieron de golpe las actividades como en Perú. En otras naciones se activaron protocolos de seguridad de forma más organizada, oportuna y con restricciones focalizadas, como en Canadá o Chile. En Brasil hubo la continuidad de trabajo en jornadas atípicas, pero con descanso apropiado del personal; y en Argentina se dieron controles estrictos de fronteras regionales, pero permitiendo el trabajo en su interior”, describió al participar en la Mesa Redonda: El rol de los proveedores en la Reactivación Minera, organizado por Revista ProActivo.

“Los impactos económicos que ha padecido el Perú son preocupantes, y ponen al sector minero en una situación de difícil competitividad a futuro, algo que hay que tomar e ir superando con sumo  cuidado”, consideró.

Prevenidos ante posible segunda ola

Dijo que ante una eventual segunda ola del virus, el sector minero peruano ya cuenta con lecciones aprendidas. “Tenemos que tomar lo mejor de la pandemia e incorporarlo en nuestros planes de manejo de crisis para estar preparados en caso tengamos que volver a frenar de golpe la actividad, tal como sucede en algunos países de Europa. Es decir, tener un plan listo sobre cómo vamos a proceder como sector, homogenizando las prácticas aprendidas”, afirmó

En ese sentido, invocó mantener un diálogo fluido con los empleados sobre la resiliencia de lo aprendido, para no bajar la guardia en los procedimientos implementados “que tienen que convertirse en nuestra nueva forma de trabajar”.

Rápida reacción

Refirió que el Covid-19 fue una situación que agarró a todos desprevenidos, a pesar de que el sector minero y sus proveedores cuentan con planes específicos de acción ante situaciones de emergencia y crisis. “Dentro de nuestros planes de manejo no estaba incluido una situación de pandemia a nivel mundial. No teníamos ni idea de que algo de tal dimensión podría ocurrir”, señaló.

Fue así que apenas declarada la emergencia sanitaria, las empresas mineras y sus pares proveedores implementaron los Comités de Crisis, como lo hizo Ausenco, para  determinar las principales acciones a tomar.

“En primer lugar, adoptamos la protección inmediata de la salud del personal, y segundo, vimos la continuidad del negocio”, subrayó.

Recordó que ese 16 de marzo se enfrentó con muchísima incertidumbre lo que pasaría, pero que como empresa se reaccionó con celeridad. “Los proveedores de la industria minera estamos acostumbrados a un sector que tiene altos estándares de seguridad y una idea continua de análisis de riesgo, lo cual nos permite reaccionar de forma muy rápida con  medidas de prevención”, puntualizó.

La digitalización, una aliada y no hay que retroceder

“Pensando en el futuro, la oportunidad que ha traído el Covid para el sector minero son las diferentes formas de hacer las cosas, que han permitido mejorar la eficiencia en esta actividad, siendo el aspecto más destacado la digitalización”, señaló.

En esa línea subrayó que la digitalización se ha convertido en una ventaja competitiva para la minería. “En esta crisis se han materializados muchos proyectos tecnológicos que, además de ser eficientes reducen el consumo de energía, lo cual significa una mejor sostenibilidad dentro del sector minero”, remarcó.

Al respecto, sostuvo que es importante que las empresas y los proveedores mineros asuman el reto “de no retroceder en lo avanzado en digitalización y en la flexibilización del trabajo remoto”.

“Cuando hablo de la digitalización, me refiero a toda la automatización de procedimientos con uso de tecnología diversa; y la flexibilización que trae consigo nos ha permitido (en Ausenco) incrementar el trabajo colaborativo entre nuestras diferentes oficinas a nivel nacional e internacional, y sin importar el tema del horario y la posibilidad del acceso a la información”, agregó.

Ausenco cumple con los clientes

Informó que a la fecha, su empresa ha logrado cumplir con todos los compromisos que tenía con los clientes mineros, dentro los plazos fijados.

“Por ejemplo, desde el punto de vista logístico, en una semana ya se tenía todo el personal de consultoría e ingeniería trabajando de forma remota, lo que a pesar de que parece fácil, no es una tarea sencilla”, citó.

Recordó que sus casi 300 empleados  de oficinas comenzaron a trabajar desde sus casas con computadoras portátiles, parte de los cuales la  empresa proporcionó  a quienes  no tenían los equipos. 

“Y se implementó un servidor más optimizado, para que los 300 empleados se conectaran eficientemente para descargar documentos, cargar información y disponer los servicios entre los, clientes”, pormenorizó.

También mencionó que un segundo grupo de trabajo de más de 100 profesionales que operaban  en el campo, con jornadas extendidas, fueron trasladados para también laborar desde sus viviendas.