ELEODORO-MAYORGA

En nuestro país, los plazos de ejecución de los proyectos eléctricos- tan necesarios para mantener el crecimiento del país-, se están alargado debido a que las nuevas entidades del Estado encargadas de los permisos y licencias socio-ambientales no está siendo coordinadas de manera eficiente, sostuvo Eleodoro Mayorga Alba, de L&Q Consultores y Abogados.

“Estas entidades no están en manos de profesionales con criterio y autoridad suficiente para aplicar racionalmente las normas. Como resultado, se alargan los plazos para concluir contratos, cerrar financiamientos y empezar obras”, explicó Mayorga, al exponer en el Día de la Energía.

Lamentó que no se tenga un plan consensuado entre los organismos a cargo de las regulaciones y permisos y tampoco con el sector privado, mentor de los proyectos eléctricos en trámite de ejecución.

Escasez de energía hacia el 2020

El especialista indicó que al 2016, según las autoridades del sector, el balance entre la demanda y la oferta de energía eléctrica no presentará déficits que podrían comprometer la actividad económica.

“Sin embargo, si no se aumenta la oferta existente, antes del 2020 no tendríamos la energía suficiente para satisfacer la demanda entonces”, acotó.

Refirió que el Comité de Operación Económica del Sistema Eléctrico Nacional (COES) analiza varios escenarios de crecimiento de la demanda, bajo requerimientos de electricidad que corresponden a un crecimiento tendencial de la economía nacional del 5% o 6% y los específicos de nuevos proyectos industriales y mineros.

Detalló que al 2020, el COES asume que entre los proyectos que conformarían la oferta eléctrica, junto a los hidroeléctricos en ejecución como Chaglla, Cerro del Águila y Pucará, estará la central térmica de Quillabamba con 200 MW.

Sin embargo, advirtió que esa oferta hacia esa fecha ocasionaría un déficit de generación eficiente (aquella de bajo costo, ya sea de hidroeléctrica o de gas natural) del orden de 980 MW.

Se encarecería tarifa eléctrica

Mayorga agregó que de concretarse, ese déficit tendría que atenuarse en algunos años con la operación de térmicas de alto costo en generación, lo que va a originar altos precios de la energía y tarifas más altas.

Señaló que, adicionalmente, se tendría que recurrir a nuevas centrales solares y eólicas. Manifestó que el COES estima que podría contrarrestar esa situación con la puesta en marcha de las siguientes etapas de la central de San Gabán y la central de Molloco, pero que la realidad es que esas obras corren el riesgo de no estar operativas oportunamente. (Para evitar el déficit de oferta energética en general proyectado hacia el 2020, la inversión en el sector tendría que incrementarse del 5% actual, hasta un 20%)

Mayorga anotó también que los 980 MW de déficit pronosticado por el COES, y los 200 MW de generación de la central de Quillabamba, requieren un suministro de gas del orden de 200 millones de pies cúbicos al día, el cual junto con el consumo de la petroquímica y el de otros usuarios, deberá ser abastecido por el Gasoducto al Sur.