Policías en un bar en el centro poblado 107 intervienen a las mujeres que encontraron allí. (Foto: Gestión)

Policías en un bar en el centro poblado 107 intervienen a las mujeres que encontraron allí. (Foto: Gestión)

La Policía de Perú encontró hoy a 53 mujeres que eran víctimas de trata de personas, cuando realizaba una operación contra la minería ilegal en el sureste del país, informó el alto comisionado de la Presidencia del Consejo de Ministros, Daniel Urresti.

“Personal especializado está conversando con ellas para llevarlas a la ciudad (de Puerto Maldonado), donde bajo la tutela de la Fiscalía de Familia se las va a calificar. Aquellas que acepten la ayuda del Gobierno serán trasladadas a albergues en Cuzco y Lima”, indicó Urresti a la agencia oficial Andina.

La operación ocurrió en el poblado denominado “107”, ubicado cerca a la carretera Interoceánica, que une a Perú con Brasil, en la región de Madre de Dios, que alberga varios bares, hostales y prostíbulos.

Según Urresti, las autoridades ingresaron a tres prostíbulos donde encontraron a las mujeres, entre las que hay también menores de edad.

En la operación participaron 700 agentes policiales, 10 fiscales de Crimen Organizado y otros cuatro de Familia, además de representantes del Ministerio de Salud, entre otros.

Urresti señaló que “107” es la base logística de los mineros ilegales que operan en la zona denominada “La Pampa”, ubicada a ocho kilómetros de la Reserva Nacional de Tambopata, una de las que alberga la mayor diversidad del país.

Desde hace unos años, en Madre de Dios se vive la fiebre del oro por el incremento del precio de ese metal, que se ubica actualmente en 1.250 dólares por onza, la cual ha traído consigo delitos como la trata de personas y la prostitución.

En 2011 el Gobierno anunció una política de tolerancia cero con la minería ilegal e inició acciones de interdicción de maquinaria pesada, combustible e insumos, lo que ocasionó protestas de los mineros.

Para poder ejercer la pequeña minería y la artesanal en Perú, los mineros deben seguir un proceso de formalización que está en marcha.

EFE