Jorge Merino

La República

El titular de Energía y Minas señaló que el “corazón” del inicio del fortalecimiento de Petroperú empieza con la modernización de la refinería de Talara y defiende los argumentos del gobierno sobre la apertura del 49% de la empresa estatal para el ingreso del capital privado, lo que asegura no se dará de la noche a la mañana.

¿Ministro, el proyecto de ley presentado al Congreso no solo abarca la modernización de la refinería de Talara, sino que es una reestructuración de Petroperú?

Hay que ver este tema como algo más integral. En primer lugar, la misma ley autoriza a la empresa que dé un paso cualitativo importante en su administración, con gobierno corporativo y estándares internacionales. El segundo punto es que tiene que haber un plan de desarrollo de negocios, pues cuando hablamos de integración vertical, el polo petroquímico, los terminales y otros puntos, se debe analizar las fortalezas, oportunidades y amenazas que tiene Petroperú de una forma globalizada. Lo que se quiere es que el “corazón” de cómo empezar la gran transformación de Petroperú, sea la modernización de la refinería de Talara. La soberanía de Petroperú no está en juego, es una empresa estratégica del Estado peruano, que va a mantener su control sin ninguna duda.

¿El financiamiento de la modernización está garantizado?

El fortalecimiento hacia dónde queremos llegar tiene que tomar en cuenta hasta cuánto responsablemente se puede financiar con los propios fondos de Petroperú, los US$ 2.730 millones que se necesitan para un proyecto integral de desulfurización, más nueve plantas de conversión y seis auxiliares, estamos hablando de una nueva refinería. Además desde el inicio se necesita US$ 765 millones de inversión privada para una serie de servicios que requieren las operaciones. En total son US$ 3.500 millones de inversión.

¿Era necesario fijar hasta 49% el ingreso del capital privado a Petroperú?

Eso será en la medida que se requiera, hasta 49%, pero no puede ser de la noche a la mañana. Primero hay que preparar la empresa, hay que crear las condiciones de valor agregado con este gran proyecto. Necesitamos el plan de negocios, para generar interés en el mercado y poner acciones en bolsa, priorizando el accionariado difundido para todos los peruanos, luego inversión nacional, tal vez de las AFP, conforme se vaya necesitando. Hay que ser responsables, y claro que necesitamos la ayuda de la inversión privada, si no no vamos a poder hacerlo, porque de lo contrario tendríamos que dedicar todo el presupuesto de la República y eso no se puede.

¿Se ha contemplado la devolución a Petroperú del crédito fiscal por el Impuesto General a las Ventas (IGV) que se genera en la Amazonía y que superaría los S/. 1.000 millones?

Esa es una variable que en su momento se va a discutir, pero en este momento estamos enfocados en que el proyecto de ley de modernización de la refinería de Talara se apruebe en el Congreso y empezar a darle forma, porque Talara se va a convertir en un polo de desarrollo que jala inversión, como por ejemplo el aeropuerto de Talara, la educación, los servicios y la integración que se va dar, porque el ácido sulfúrico que produzca la refinería se necesita en los fasfatos de Bayóvar para convertirlos en fertilizantes, es decir, va a dinamizar la macrorregión norte.

 Si Talara se va a modernizar, ¿no debería hacer lo mismo la refinería La Pampilla?

Sin duda, la ley en Perú obliga a que se fije una fecha en que no se va a poder comercializar combustibles con 50 partes por millón de azufre, por temas de salud pública. Y efectivamente si el Estado a través de su empresa Petroperú está dando el ejemplo, el sector privado tiene que hacer lo mismo.

Si Petroperú no podrá invertir en otros proyectos, ¿qué se hará para poner en operación el lote 64 que fue devuelto a la empresa estatal?

Para explotar el lote 64 se necesita completar la cuantificación de reservas, un plan de desarrollo y hacer más perforaciones, todo eso es capital de riesgo. Hay que buscar que alguien haga ese capital de riesgo, porque Petroperú ahora no puede; la prioridad es Talara.
¿Y en el caso de la participación que Petroperú iba a tener en el gasoducto y la petroquímica?
Todo eso estará contemplando en el plan de negocios que vamos a estudiarlo, para lo cual estamos contratando a una empresa de primer nivel.

Usted afirmó que se busca tener un manejo menos político de Petroperú, pero en un artículo de la última Ley de Presupuesto se señala que la Junta de Accionistas (vale decir los ministros de Economía y de Energía y Minas) podrán cambiar a los miembros del directorio cuando lo crean conveniente, ¿no es esto contradictorio?

Todos los directorios de todas las empresas del mundo están supeditados a los intereses del dueño, y el dueño en este caso es el Estado y lo representa el Poder Ejecutivo. Se entiende que los directorios que son nombrados tienen que ser personas de alta calificación, pues deben seguir las políticas de desarrollo del país. Además un director debe tener una buena dieta, porque es un profesional de alto conocimiento, que le va a dar valor a la empresa. Al final todos cumplimos funciones temporales.